ice la historia reciente de la Real que la temporada 2014-15, aquella que Jagoba Arrasate comenzó en el banquillo y terminó con David Moyes como entrenador, comenzó a torcerse en Krasnodar, todavía en el mes de agosto. Lo cierto, sin embargo, es que el caldo de cultivo para que aquello sucediera se generó bastante antes, durante la campaña anterior. Así lo tienen en cuenta algunos, señalando a la derrota en casa contra el Villarreal (1-2), en la última jornada, que condenó a los txuri-urdin a jugar dos previas europeas y no una. Muy pocos recuerdan, mientras, que el duelo directo final ante los amarillos, con la sexta plaza en juego, se habría evitado en caso de triunfo contra el Granada, también en casa, en la 36ª jornada.

Marcó Carlos Vela en el minuto 78. 1-0. La Real se aseguraba así ser al menos sexta, y evitar comenzar a competir a finales de julio. Pero en el minuto 94 empató el nigeriano Odion Ighalo, de nefasta temporada. Solo había anotado un gol en aquella Liga, un 31 de octubre de 2013. Más de seis meses después, el 5 de mayo de 2014, condenó a la Real a seguir luchando por evitar esa séptima plaza a la que finalmente caería. El empate en San Mamés (1-1) en la 37ª jornada resultó insuficiente. La mencionada derrota contra el Villarreal, fatídica. De haber sido sextos, y atendiendo a la suerte del Submarino en el posterior sorteo estival, los de Jagoba se habrían medido al Astana de Kazajistán en agosto, su única previa. Sin embargo, finalmente tuvieron que jugar dos, contra el Aberdeen y contra un Krasnodar de pujante proyecto.

Tuvo buena parte de culpa el mencionado Ighalo, un punta nigeriano que aterrizó en Europa con 18 años para jugar en el modesto FK Lyn noruego. No tardó en rendir allí, por lo que un año después de su desembarco en el continente, ya en verano de 2009, el Udinese italiano pagó 1,9 millones por sus derechos. Las cesiones a clubes satélite del emporio Pozzo, empresario transalpino propietario de la entidad, comenzaron a sucederse, con Granada y Watford como destinos recurrentes. Hasta que en enero de 2017 Ighalo dejó la Premier para competir en la liga china. Allí se desenvolvía, ya en un segundo o tercer plano futbolístico, hasta que este pasado invierno se acordó de él todo un Manchester United, necesitado de delanteros.

En enero de 2017 dejó el Watford inglés para jugar en la liga china. Este pasado invierno, fichó por el Manchester United