donostia - La plantilla de la Real continúa arrancándole hojas a la agenda de la presente semana, que concluirá el domingo con la visita al Celta en Balaídos (12.00 horas). La atención durante estos últimos días se ha centrado en el estado de la enfermería txuri-urdin, de la que han salido David Zurutuza y Rubén Pardo, no así Aritz Elustondo. Al menos por el momento. El concurso del riojano supuso ayer la novedad del entrenamiento, del que volvió a ausentarse el defensa beasaindarra. El viernes pasado sufrió una rotura fibrilar de primer grado en el aductor y tiene difícil recuperarse para Vigo.

La más que posible baja de Aritz el domingo se verá paliada por el regreso de Diego Llorente. El defensa madrileño fue expulsado en Anoeta contra el Getafe, se perdió la victoria ante el Betis y volverá a estar disponible para Imanol, de cara a la visita al Celta. No resulta descabellado pensar en una pareja formada por el propio Llorente y Robin Le Normand en el eje de la zaga, ya que el francés cumplió con nota frente a los andaluces. Pero la titularidad de la dupla implicaría la suplencia de Zubeldia o de Guevara en Balaídos. Y está por ver que el técnico apueste por sentar a alguno de ellos.

zubeldia, la clave Una vez más, la llave del rompecabezas del once residirá en la demarcación que Imanol otorgue al centrocampista azkoitiarra. Si apostara por retrasarle a la defensa, la presencia en la alineación de Le Normand se vería comprometida. Si el entrenador situara a Zubeldia en el pivote, Guevara tendría muchos boletos para iniciar el encuentro en el banquillo. Y este seguiría en el equipo en caso de suplencia del propio Zubeldia.

En circunstancias normales, aquí terminarían las incógnitas, ya que Zaldua, Monreal, Merino, Odegaard, Portu, Oyarzabal y Willian cuentan con el puesto en el equipo prácticamente asegurado. Lo que ocurre es que la presencia en el once de Álex Remiro el pasado domingo, en sustitución de Miguel Ángel Moyá, abre la puerta a un cambio definitivo bajo palos. El movimiento implicaría la continuidad del navarro, de progresiva adaptación al club, al propio equipo y a la categoría. Aunque tampoco puede descartarse que, tal y como hiciera en Sevilla tras jugar Remiro ante el Alavés, Imanol devolviera la titularidad al meta balear.