Todavía maravillado con todo lo vivido previamente, ya de madrugada, Carlos Vela reconocía tras el partido contra el Sevilla que lo acontecido superaba lo que él había imaginado en sus “mejores sueños”. Se despidió con honores de Anoeta, marcó el 3-1 en el minuto 90 y fue manteado por sus compañeros en lo que, lejos de suponer una fantasía, fue una realidad. La fiesta, en cualquier caso, ya forma parte del pasado para el futbolista mexicano.
¿Y ahora qué? El panorama para el delantero de Cancún en el corto plazo viene marcado por el calendario de la Major League Soccer, la liga de fútbol estadounidense. Su temporada regular arrancará en marzo, por lo que el técnico Bob Bradley, entrenador de la selección de las barras y las estrellas en el Mundial de Sudáfrica 2010, ha programado el inicio de los entrenamientos para mediados de enero. Será entonces cuando Vela comience a trabajar con sus nuevos compañeros, de momento solo ocho. Y es que el Los Angeles Football Club es un equipo de nueva creación que debutará en el próximo campeonato.
De momento, integran la plantilla, además de Vela, un portero norteamericano, dos centrales (uno belga y otro estadounidense), un lateral egipcio cedido por el Basilea, un mediapunta costarricense, un extremo ghanés y dos delanteros: el joven uruguayo Roosi, que llega de Peñarol y el argentino Pacheco (Lanús). No solo está en construcción el plantel, también un coqueto estadio para 22.000 espectadores. El equipo debutará en partido oficial, el domingo 4 de marzo (23.00 horas de Gipuzkoa) en el campo de los Seattle Sounders.