donostia - Jokin Aperribay comenzó su discurso a los accionistas reconociendo que "los últimos resultados del primer equipo no han sido buenos", y destacando la decepción que supuso "la eliminación de la Copa". El máximo dirigente del club realista , sin embargo, pasó de puntillas por esta situación y no entró a analizar los motivos de esta crisis, y pidió a los aficionados "confianza" y que apoyen "más que nunca" a un equipo que desea que "vuelva a la senda en la que estaba hasta hace poco".
El presidente realista, no obstante, quiso recordar después que "2017 nos ha devuelto a Europa", que cinco jugadores del filial han subido a la plantilla de Primera y que, "aunque el primer equipo está en una mala racha", el resto, salvo el conjunto femenino, está entre los cuatro primeros de sus torneos: "Este es el camino que tenemos que seguir".
El presidente txuri-urdin se centró más tarde en explicar las líneas de actuación del club en el futuro y aseguró que se están "sentando las bases de la Real de los próximos cien años". Aperribay insistió en la vinculación de la Real a Gipuzkoa y a los valores guipuzcoanos, y en su preocupación por que "las personas perciban que la Real se preocupa por ellas, en el campo y fuera". Además, la vinculación entre la Real y Gipuzkoa "no puede depender solo de los resultados del primer equipo", sino que espera que, además, los guipuzcoanos "se reconozcan con la forma de ser y los valores de la Real". "El mejor legado" es mostrar "que la Real tiene una forma de ser y un modelo basado en la forma de ser y los valores de los guipuzcoanos", tales como el trabajo en equipo, la humildad o el respeto. "Intentamos cumplir la misión de ser los mejores dentro y fuera del campo. Nosotros sin nuestro entorno no seríamos nada. Queremos una Real cada vez más vinculada a Gipuzkoa". "En el ámbito económico, la Real goza de una buena salud. Además tiene un proyecto, tiene una estrategia y conoce el camino que quiere recorrer para construir su futuro", afirmó.
El máximo dirigente realista apostó por "fortalecer las estructuras y las alianzas" de la Real. Entre las estructuras del club, Aperribay volvió a referirse al nuevo Anoeta como "el mejor fichaje" para ayudar a hacer más competitiva a la entidad. Además, el estadio donostiarra ayudará al club a establecer "una nueva forma de relación con los aficionados". El nuevo campo se convertirá "en un espacio con actividad más allá del fútbol", con espacios empresariales y tecnológicos.
Al igual que en la Junta de 2016, el presidente del club txuri-urdin defendió el proceso de "digitalización", que está permitiendo "que conozcamos mejor a las personas".
El tercer gran instrumento del club sería Zubieta, "el alma de la Real". Aperribay informó de que el club "seguirá invirtiendo en Zubieta" e informó de que se construirá un nuevo aparcamiento en sustitución del Z3 "para que la asistencia sea más cómoda".
El dirigente también espera fortalecer "las alianzas" con "instituciones, clubes convenidos, universidades...". Aperribay, asimismo, defendió la iniciativa Realzale Incondicional: "Gracias a "las alianzas comerciales", su objetivo es que el socio se vea recompensado y no pague por venir a Anoeta".
El dirigente afirmó que la responsabilidad de la Real con el fútbol base "no es solo dar dinero", sino "compartir conocimiento" con los clubes convenidos.
La entidad de Anoeta, además, participará en "programas culturales y sociales" debido a la voluntad de poner a la Real "en el centro de la sociedad guipuzcoana, tanto en lo deportivo como en lo social". En este último aspecto, destacó la creación de un equipo de deportistas con discapacidad así como la participación de la Real en campañas de prevención del acoso. - I.A.