donostia - Con la resaca de la derrota encajada la víspera contra el Málaga aún latente, Gero Rulli se mostró ayer especialmente expresivo a la hora de valorar el emparejamiento txuri-urdin con el Salzburgo. “Cuando uno alcanza esta fase, todos los equipos empiezan a ser difíciles. No hay ningún rival accesible. Todavía falta mucho tiempo para la eliminatoria y tenemos cosas más importantes que hacer ahora mismo”, indicó el portero txuri-urdin. En parecidos términos se expresó el vicepresidente Mikel Ubarrechena, desplazado a Nyon. “Estamos en una dinámica que no es la adecuada, pero tenemos tiempo. Estoy seguro de que en febrero el equipo será competitivo”, indicó.
En tierras austríacas, mientras, el entrenador del Salzburgo, Marco Rose, valoró el resultado del sorteo. “Será emocionante medirnos a un equipo de tradición como la Real. Buscaremos demostrar nuestra capacidad y ganar experiencia para el futuro”, analizó. - N.G.