La expedición realista completó un viaje agradable y sin complicaciones hasta Skopje, donde aterrizó pasadas las 14.30 horas. El horario es el mismo que en la capital donostiarra. La temperatura y el clima parecen muy similares a los que se han vivido en la calurosa última semana en Gipuzkoa, aunque cuando anochece refresca. Sin embargo ayer, cuando los blanquiazules iniciaron su viaje en Zubieta, les despidió una leve e incesante lluvia. Pasadas las 8.30 horas, el minibús de la prensa y el autobús que incluía a aficionados, políticos como Martín Ibabe, concejal de Deportes del ayuntamiento donostiarra, trabajadores, directivos y exjugadores del club como Javi de Pedro, José Mari Martínez o Shanti Bakero; emprendieron el camino rumbo al aeropuerto de Loiu, al que llegaron una hora después. El equipo lo hizo media hora más tarde, encabezado por Jokin Aperribay y por Lorenzo Juarros, y con muchas caras de sueño después del madrugón.
La nota curiosa en la espera a la salida del avión fue que, mientras aguardaban para facturar, se encontraron con un grupo de unos 20 seguidores blanquiazules de Getaria y alrededores y de la Peña Bizkaia Txuri-Urdin que iban a viajar hacia Skopje haciendo escala en Múnich y Viena, donde pasarían seis horas haciendo turismo hasta tomar el último vuelo que les transportaría hasta la capital macedonia, donde tenían previsto aterrizar, si todo iba bien, pasadas las 23.00 horas. En el club tuvieron el detalle de meterles en el chárter oficial con el equipo, por lo que viajaron directamente y pudieron llegar ocho horas antes a un destino en el que pasarán cinco días de vacaciones. Ni qué decir tiene que eran los más contentos e ilusionados de toda la expedición.
El avión, que era muy grande y lucía con todo su esplendor el precioso escudo txuri-urdin en su fachada exterior, al lado de las escalerillas; tenía una capacidad para 247 personas. finalmente se ocuparon 125 asientos, por lo que la gente paseó mucho a lo largo del viaje y se formaron corrillos de todo tipo para mantener conversaciones volcadas en el fútbol y en la situación del conjunto txuri-urdin. Los futbolistas se dejaron ver menos en la parte trasera, ya que se sentaron adelante y como suele ser habitual prefirieron no desplazarse demasiado. Xabi Prieto, sentado junto a De la Bella, sí se pasó gran parte del viaje charlando con un par de amigos.
Seguridad Como suele ser habitual cuando se sale al extranjero, en el avión también viajaron varios er-tzainas encargados de velar por la seguridad tanto del equipo como de los seguidores. Finalmente se esperaba que a más de 300 hinchas que fueron llegando a cuentagotas hasta Skopje a lo largo del día de ayer y de hoy. Al contrario que en San Petersburgo, donde estaban más preocupados por los ultras, las referencias que tenían de la ciudad y de la parroquia eran muy buenas. Al parecer son muy hospitalarios y tienen ganas de conseguir atraer al turismo a través del deporte. La Policía local les ha comunicado que no van a tener ningún problema, aunque también controlarán los puntos clave para evitar que se produzcan incidentes y vigilar que nadie se propase.
Ayer por la tarde ya fueron muchos los blanquiazules que se dejaron sentir en la conocida Plaza de Macedonia, donde se encuentra una escultura ecuestre de Alejandro Magno en la que no pararon de posar para sacar las tradicionales fotografías con enseñas txuri-urdin.
Para hoy está previsto que haya una quedada a las 12.00 horas en el mismo punto de encuentro, para estar allí comiendo y bebiendo, antes de partir en kalejira rumbo al estadio, que se encuentra a unos 20 minutos, aproximadamente una hora y media antes del comienzo del choque.
La Real nunca camina sola. Eso lo sabíamos todos desde hace tiempo. Ahora le toca a ella hacer feliz a su gente.