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“Pocas cosas podrán pagar lo querido que me siento en la Real”

Oyarzabal es una persona muy madura para sus 19 años. El eibartarra no oculta su amor incondicional a la Real y, pese a ser ambicioso, solo piensa en triunfar aquí

“Pocas cosas podrán pagar lo querido que me siento en la Real”Javi Colmenero

Donostia. Supongo que el momento llamada de la Selección sería tremendo.

Sí, estás ahí y empiezan a llegarte cosas al móvil, yo al principio no me lo creía. Estaba todo el mundo llamándote, diciendo felicidades y yo pensando que me estaban vacilando, que algo había salido mal. Ya te digo, muy contento, para mí un momento más de este año para celebrar.

Aunque usted ya conocía Las Rozas, imagino que llegaría temblando.

Sí, tuvimos un amistoso con el sub 19 contra el Getafe B entre semana y estuvimos tres días entrenando, pero con la absoluta, llegas ahí un poco asustado y ves gente que ha sido campeona de Europa y campeona del Mundo y que estás ahí con ellos... Al principio no sabes ni qué decir, ni qué hacer. Luego, con el tiempo, ellos también te introducen, se van soltando y te hacen soltarte a ti también. Fue una semana inolvidable.

¿Alguno que le haya impactado?

Bueno, a alguno ya conocía, como al sportinguista Meré con el que tenía relación con la sub 19; a los del Athletic también porque en el aeropuerto me junté con ellos, pero el grupo entero fue majo, al final todos me acogieron, todos me intentaron ayudar y todos me dieron conversación...

El nivel de entrenamientos de la absoluta será top.

Sí, en rondos y así, si te tocaba pringar, pues te tocaba pringar, es lo que hay. Te estás juntando con los mejores jugadores del mundo, con los que hace cuatro años fueron campeones de Europa, pasando por encima como pasaron sobre los rivales, y estás tú con ellos, pues ya sabes que te va a tocar meterte al medio y el nivel que hay allí es espectacular.

No le deslumbran los focos, ¿no?

No, no, por suerte, la familia me ayuda en eso, los amigos también me ayudan en eso.

Le han dicho en algún momento, no te crezcas

No, no me hace falta que nadie me diga nada, no me voy a subir, tengo los pies en el suelo. Por mí solo ya me vale, pero siempre tienes a alguien, mis padres que me recuerdan que esté tranquilo, que disfrute, sí, pero que no me vuelva loco, que al final esto es un día así, al día siguiente es lo contrario, que disfrute, que viva el momento, que hay que aprovechar esto, que siga como hasta ahora.

Un día va al kiosko y aparece su foto de rodillas en todos los periódicos.

Sí, es algo que impacta, que no te lo crees ni tú que lo estás viendo, pero ya te digo que te vas dando cuenta que estás haciendo bien las cosas y que te salen bien y poco a poco empiezas a tener más confianza en ti, que es lo que te ayuda a seguir.

¿Qué concepto tiene de la prensa?

Bah...

Ha sonado despectivo (risas).

No, yo creo que es su trabajo, aunque muchas veces nos parezca mejor o peor, pero son cosas que están dentro del fútbol. Cada uno tiene su opinión.

¿Suele leer los periódicos?

Sí, me gusta leer la prensa, pero sin darle mayor importancia, tampoco. Leer, ver qué pasa, informarme de todo. Me gusta estar informado de lo que pasa hoy en día en todas partes.

¿Ningún compañero o nadie del club le ha dicho que tenga cuidado con la prensa?

No, qué va... Comentarios siempre hay siempre, pero no son ni despectivos ni malos. Lo mismo con la prensa que con jugadores, que con compañeros... Al final, el día que te levantes con el pie izquierdo, puede que un comentario tonto de cualquier compañero te siente mal.

¿Su famoso pie de talla 47 le beneficia o le perjudica?

No, no creo que me perjudique ni me beneficie, es algo con lo que tienes que vivir, tienes que jugar, llevo así toda la vida. El aita calza más pequeño que yo, la verdad es que no sé de donde vendrá, pero es lo que hay. Tirar con ello y punto.

Dicen está hiperdesarrollado para su edad.

Cuando estaba el año pasado con los compañeros en el juvenil, veía a alguno las piernas que tenía y pensaba, de dónde sacará esas piernas, mucho más fuertes y más desarrolladas que yo. Tampoco me he parado a comparar, igual a ellos les ha parecido, pero no me veo tan diferente a cualquier otro. Si lo dicen será por algo, pero no me he parado a pensarlo.

Los que le conocen dicen que tienes un cañón en ese pie izquierdo.

Si tienes que sacar algo a relucir, un punto fuerte, puede que sea eso, pero se tienen que dar las circunstancias y el momento para poder usarlo.

Poco a poco se acercó en lo de las faltas, pero Bruma le quitó las dos últimas, ¿se las pidió?

No, él estaba convencido de que la quería tirar y la quería meter; la tiene que tirar el que más confianza tenga y era él en ese momento, así que adelante. El año pasado me cayó la responsabilidad de sacar las faltas, los córners y tal y tuve la suerte de marcar un gol de falta y espero que pueda meter alguno más.

¿En qué cree que debe mejorar?

El medir esas ganas y ese ímpetu para acabar el partido entero, porque eso pesa, con 18-19 años sales y quieres correr y hacer todo, pero tienes que medir porque puedes llegar al final del partido con ese cansancio que alguna vez no habría sido necesario.

En Bilbao, por ejemplo, De Marcos casi le saca las tripas...

En ese partido, ese día, no quedaba más que correr, correr hasta acabar. Si hay que hacerlo se hace y punto, pero muchas veces las ganas te hacen correr sin pensar y hay que pensar en frío y reservar esas fuerzas para el final.

¿Son muy distintos Moyes y Eusebio?

Yo creo que cada uno tenía su estilo, cada uno su forma de trabajar, pero yo estoy agradecido a los dos. He hecho medio año, más o menos, con cada uno. Moyes me llevó en pretemporada y me hizo debutar.

¿Hablaba Moyes con usted?

Sí, pero al final el idioma y tal...

En una entrevista en Inglaterra, antes incluso de su explosión, dijo que había dos jugadores en la cantera que destacaban, por Zubeldia y usted. ¿Notaba que le gustaba?

Bueno, señalado no sé si estaba, si subes a entrenar será por algo, aquí no se regala nada a nadie. Le estoy agradecido a Moyes porque fue el que me llevó en pretemporada e hizo que todo comenzara y a Eusebio porque me ha dado confianza plena este fin de temporada.

¿Está Eusebio muy encima suyo?

Sí, eso se nota, al ser joven, tanto él como el segundo entrenador, como el preparador siempre te dan consejos para intentar pillar a los de arriba, porque al principio se te hace difícil seguir los entrenamientos y el gimnasio. Y siempre intentan dar consejos y ayudar.

Hace un par de años, Zurutuza declaró en una entrevista, que todo jugador que destaca en Zubieta tiene una llamada del Athletic.

Yo no sé nada de eso, ahora estoy centrado en descansar, en el mes que me queda por delante para acabar los exámenes y luego descansar para la pretemporada. En lo único que me voy a centrar es en la Real y llegar lo mejor posible para hacer un buen año con la Real.

En Bilbao se habla y se pide que paguen la cláusula de 40 millones, como si nada.

Yo también te digo con toda tranquilidad que me quiero quedar aquí. Yo lo que quiero es estar en la Real, que es el club que me lo ha dado todo, del que soy desde pequeño y no tengo otra cosa en la cabeza más que eso.

¿Su madre de dónde es? Porque creo que toda su familia es del Athletic...

Mi madre de Elorrio y el aita de Eibar. Pero mi ama siempre ha sido de la Real. Mi amama puedo decir ya que es de la Real también. Antes igual tenía el corazón dividido, pero ahora ya se ha hecho de la Real. Los primos también van dividiendo el corazón poco a poco, aunque les costara más. Poco a poco.

También se habla ya de una posible mejora de contrato, pese a haber renovado este año.

Por ahora no sé nada ni nadie me ha dicho nada. Ahora que olvidarse de todo y desconectar, que al final la cabeza hace mucho y nos hace falta. Luego, a la vuelta, si hay que hacer algo se hará y si no estoy bien como estoy, no me voy a quejar de nada. Yo solo estoy agradecido a la Real porque me lo ha dado todo. Estoy muy contento.

Hombre, imagino que también querrá que le valoren como merece.

Eso tampoco lo es todo. Con pocas cosas se podrán pagar lo querido que me siento en la Real.

¿Se plantea pasar toda su carrera en la Real o es más ambicioso?

Yo soy ambicioso. Ahora estoy en la Real, que es desde el principio al fin lo que he querido siempre. Estoy perfecto aquí, muy contento con lo que tengo, no voy a andar pensando en que si lo uno o lo otro. Voy a intentar hacerlo lo mejor posible aquí.

¿Es bastante maduro para su edad, lo nota respecto a la gente de su edad?

Todo lo que te pasa va cambiando cosas y vas aprendiendo.

¿Qué estudia?

Estoy en primero de ADE (Administración y Dirección de Empresas) en la Universidad de Deusto. El primer semestre aprobé todo y ahora tengo los exámenes la semana que viene y a ver qué tal va, ojalá que siga igual de bien que hasta ahora.

¿Cómo son los lunes en la universidad después de haber triunfado el fin de semana?

Los compañeros me hacen bromas, se ríen y comentan. Eso no falta, pero como siempre son de buen gusto y sin hacer daño siempre son bienvenidos. Al final mi felicidad también se la transmito a ellos.

¿Sus padres son exigentes?

Sí, pero al final yo mismo, a mí tampoco me gusta dejar las cosas a medias. Antes de empezar a jugar, ya tenía decidido que iba a estudiar en septiembre una carrera, e intentar acabarla cuanto antes.

Lo peor del fútbol.

No creo que sea tampoco lo peor. Al final es que la gente te puede llegar a admirar, a pedir una foto, lo considero parte del fútbol. Que al final es lo que menos te gusta, porque la gente te está mirando y tal Pero tienes que darte cuenta de que es parte del fútbol, si has elegido eso, deber ser consciente que forma parte de eso. De momento no hay problema.

No parece tímido.

Creo que te vas acostumbrando, pero todavía no es lo mismo estar hablando con tus amigos o hacer una entrevista o rueda de prensa. Siempre tienes ese punto de nerviosismo y vergüenza que cuesta quitártelo de encima.

Dicen que no habla mucho en el vestuario, pero que cuando lo hace refleja mucha personalidad.

Cuando llegas al vestuario y ves a todo el mundo, con la de años que llevan, no vas a llegar y volverte loco. Tienes que ir cogiendo confianza, conociendo a cada uno cómo es... Pero cuando te toca hablar, o cuando te toca decir algo, no te vas a cortar, porque les vas conociendo, te van ayudando.

O sea que ya pega gritos en el túnel de vestuarios.

No, todavía no, aún soy joven para eso.