donostia - Asier Illarramendi se retiró del entrenamiento de ayer debido a unas dolores que le vienen acompañando desde hace varias semanas que no le impedirán jugar en Eibar: “Llevo toda la temporada arrastrando molestias en el tobillo. Hay días que me duele más y otros menos. En este caso me ha dolido bastante, pero espero estar bien para el sábado”.
La Real no quiere bajar la exigencia en el derbi tras ganar a Sevilla y Barça: “Ya hemos visto esta temporada que cuando jugamos con intensidad podemos ganar cualquier partido, pero también perder si no lo hacemos. Al Eibar le gusta actuar con intensidad, velocidad y apretando mucho. En ese sentido, está claro que si no jugamos con las mismas ganas que ellos, nos van a ganar. Hay que salir como en los dos últimos partidos, con intensidad y aprovechando las ocasiones”.
El equipo quiere finalizar dejando un buen sabor de boca a su gente: “Los puestos de abajo están lejos y también los que dan derecho a Europa. Hay que mirar al siguiente partido, tratar de ganarlo y acabar bien la temporada, lo más arriba posible”.
El vestuario txuri-urdin está motivado para derbi: “Es un partido especial, hasta ahora el equipo guipuzcoano siempre era la Real. En todos los pueblos se animaba a la Real, y ahora que el Eibar también está en Primera, se nota en las calles. Nos tienen muchas ganas porque hasta ahora el equipo guipuzcoano éramos nosotros y ellos se han puesto al mismo nivel”.
El Eibar todavía no ha sellado su salvación y ha encadenado una mala racha: “Ellos tampoco llevan muchos puntos en esta segunda vuelta, y está claro que, a pesar de que todavía tienen distancia con los de abajo, querrán lograr cuanto antes el objetivo de mantenerse en Primera. Será un partido difícil y nos tendrán muchas ganas. Jugarán con mucha intensidad. Durante el año he visto bastantes partidos del Eibar y sé cómo juegan. Será difícil”.
En el plano personal, Illarra ha mejorado mucho después de un año con altibajos: “Durante la temporada tampoco podemos estar todos al mismo nivel. Hay partidos en los que juegas mejor y otros peor, pero al final somos humanos. En los partidos te pueden salir las cosas mejor o no, pero los que jugamos siempre damos el 100% y tratamos de hacerlo lo mejor posible. El trabajo nunca falla”.
El mutrikuarra, que no catalogó la victoria ante el Barça como su mejor noche en la Real, no está de acuerdo con que actúa más cómodo con una medular más poblada: “Depende de los encuentros. Según con quién juegas te cambia un poco el rol. Si juegas con futbolistas más ofensivos, haces un trabajo más defensivo; y si juegas con centrocampistas más defensivos, tratas de hacer un juego más ofensivo. Hay que tratar de coger un rol distinto según con quién juegas”.