donostia - “Estoy buscando cesiones, chicos jóvenes, futbolistas que terminan contrato... Mi idea es la de reforzar al equipo con tres o cuatro fichajes”. Este fue el mensaje claro e inequívoco que repitió en más de una ocasión David Moyes antes de marcharse de vacaciones. Y, teniendo en cuenta que los dos primeros refuerzos que están a punto de cerrarse son Bruma (extremo portugués de 20 años) y Diego Reyes (central de 22 años), el club está siguiendo el guion esperado y establecido por el británico, que ha dado el visto bueno a ambas operaciones.

La Real necesitaba un giro de tuerca importante para la próxima temporada y, a falta de que se oficialicen los fichajes y se concrete el número definitivo de incorporaciones, ya se puede adelantar que la plantilla presentará una imagen bastante renovada. Eso es al menos lo que se presupone para el comienzo de la temporada oficial, ya que, por ahora, el único fichaje que estará seguro el sábado en Zubieta será Raúl Navas.

No se puede discutir que las apuestas van a ser arriesgadas y que lo lógico es pensar que cuando se incorpora a varios jóvenes que todavía no están hechos alguno te va a salir rana. Resulta curioso recordar que, sin embargo, Diego Reyes y Bruma no responden al perfil de refuerzos marcados por Aperribay y Loren en sus respectivas comparecencias y que disentía notablemente con lo señalado por Moyes. El presidente abogó por escudarse en una fuerte apuesta por la cantera: “En el club se confía muchísimo en las generaciones que vienen. La del 94, 95, 96 y 97. Va a haber oportunidades para los de casa y creemos en esa filosofía”. El director deportivo manifestó que necesitaban experiencia para proteger a los jóvenes que fueran dando el salto definitivo: “Vamos a intentar hacer el menor número de fichajes posible. Yo no me voy a cansar de dar oportunidades a la gente de casa. Hervías y Oyarzun no pueden dejar de jugar. La excesiva juventud la tenemos en los jugadores de casa. Queremos buscar un poco más de experiencia y de recorrido”.

Todas las personas consultadas por este periódico coinciden en que Reyes y Bruma son dos diamantes en bruto, con unas condiciones sensacionales, pero que todavía no han logrado explotar y asentarse en la elite del fútbol europeo. La Real apuesta a ganador con ellos.