DONOSTIA. Mariga, el primer jugador de Kenia que jugaba en la Primera División española, podría dejar de pertenecer en las próximas horas a la Real y su destino sería el Parma, aunque esta gestión se anuncia y se da incluso por cerrada muchos días y no ha terminado de concretarse.
El nombre de su compañero Ifrán ha vuelto en el mes de enero a estar sobre la palestra de Zubieta, ya que el propio jugador pidió al club que aclarara su futuro, ante la oferta en firme del Peñarol y los rumores que le situaban como candidato a reforzar al Espanyol.
La Real lo considera, sin embargo, una pieza insustituible y se supone que en febrero seguirá entrenándose en Zubieta, a pesar de la poca particiación que le concede Philippe Montanier. No obstante, en las últimas horas del mercado lo que era negro pasa a ser blanco y no se puede dar por cerrada ninguna opción.
De confirmarse los indicios que apuntan a que no habrá ninguna llegada de refuerzos, sería el primer año en Primera División en muchas temporadas en las que la Real no contrata a ningún jugador.
Nombres como Demidov, la pasada temporada, o en la anterior etapa en la máxima categoría los de Germán Herrera, Savio Bortolami, George Demetradze, Dimitri Khokhlov y Edgaras Jankaukas, entre otros muchos, entraron en la nómina del club, eso sí, con desigual fortuna.