Las higueras castigan a las avispas con la muerte de su progenie si éstas no les ayudan a polinizar, según se desprende del último estudio realizado por investigadores del Smithsonian Tropical Research Institute norteamericano. Los higos y las avispas que polinizan las plantas representan uno de los ejemplos favoritos de los biólogos de beneficio mutuo entre dos especies diferentes: a cambio del servicio de polinización proporcionada por la avispa, la higuera le proporciona alojamiento y comida a la avispa para el desarrollo con los higos. Sin embargo, las avispas no siempre polinizan las higueras y entonces éstas castigan a las tramposas dejando caer la fruta no polinizada, causando la muerte dentro de la progenie de la avispa. "Las relaciones necesitan dar y recibir. Queremos saber lo que obliga a mantener este acuerdo de más de 80 millones de años entre las higueras y las avispas", afirmó el investigador Charlotte Jander. Algunas especies de avispas transportan de forma pasiva el polen porque éste está pegado a su cuerpo sin que se den cuenta. Mientras, otras lo hacen de forma consciente al transportar bolsas especiales.
