La gala de la 37 edición de los Premios Goya de este sábado puede tener una banda sonora made in Gipuzkoa. La eibarresa Maite Arroitajauregui, Mursego, opta a dos galardones –mejor música original y mejor canción– por su trabajo junto a Aranzazu Calleja en Irati, de Paul Urkijo, mientras que el azkoitiarra Joseba Beristain hace lo propio en esa segunda categoría por su labor en Unicorn Wars, de Alberto Vázquez. Dos propuestas de “estilos muy diferentes” que beben de “películas muy distintas” y a las que se suma un tercer nominado vasco, el vizcaino Fernando Velázquez, por Los renglones torcidos de Dios.

Para Mursego, Irati ha supuesto su séptima incursión en un largometraje de ficción –el pasado año estrenó otros dos filmes más, La consagración de la primavera y Black is Beltza II: Ainhoa–, su segunda y tercera nominación a los Goya y, sin lugar a dudas, su trabajo más complicado. “Ha sido una locura organizar a 57 músicos, dar con instrumentos con los que nunca antes había trabajado, contar con un coro... Ha sido un trabajo muy absorbente”, confiesa la músico, que estos días apenas tiene tiempo de pensar en la gala al estar trabajando en una nueva banda sonora. “Me va a venir muy bien irme el fin de semana a Sevilla a desconectar y rodearme de colegas”, cuenta.

Aranzazu Calleja y Mursego, nominadas a mejor música original y canción por 'Irati'. N.G.

La eibarresa llegó a la ambiciosa historia épica de Paul Urkijo gracias a su trabajo en Akelarre, que ya le alzó con el Goya a mejor música original junto a la bilbaina Aranzazu Calleja hace dos años. “Paul veía similitudes entre los dos filmes y nos propuso hacer el trabajo. Quería sacarnos de nuestra zona de confort y llevarnos hacia unas composiciones de mayor epicidad sin dejar de lado nuestra huella personal”, revela, al tiempo que confiesa que, esta vez, trataron de dar con unos sonidos diferentes a los realizados para el filme de Pablo Agüero.

Si en esa ocasión las dos compositoras tuvieron que trasladarse hasta la Euskal Herria de comienzos del siglo XVII, esta vez tuvieron que ir más allá, hasta el siglo VIII, tiempo en el que transcurre la epopeya ideada por el cineasta alavés en la que no faltan seres mitológicos y grandes batallas. “No sabemos cómo era exactamente la música de la Edad Media porque no hay fuentes escritas, por lo que tuvimos que imaginarnos cómo sería. Añadimos instrumentos que habría seguro, como la percusión, y para darle un toque más antiguo incluimos la viola de gamba y la nyckelharpa –el instrumento más antiguo conocido hoy en día–”, cuenta Mursego, quien también tuvo que empaparse, “no con gusto”, de películas sobre templarios para ver qué se había hecho antes. “Influyó mucho y le dimos varias vueltas a El caballero verde, en la que hay cosas interesantes al incluir sintetizadores con música clásica”, comenta.

“Paul Urkijo quería sacarnos de nuestra zona de confort y llevarnos a composiciones de más epicidad”

Mursego - Nominada a mejor música original y canción

A pesar de tanto esfuerzo, que le ha llevado incluso a poner en duda si seguirá o no componiendo para películas –“Casi prefiero que no me preguntes sobre eso. Ahora mismo voy a terminar el proyecto en el que estoy y ya veré”, asevera–, Mursego tiene claro que el Goya a mejor música original irá a parar en esta ocasión a manos de su colega Olivier Arson, autor de la banda sonora de As bestas. El de mejor canción, no obstante, está en duda. La artista guipuzcoana opta junto a Calleja y el propio Urkijo por el tema Izena duena bada en una categoría en la que hay “estilos muy diferentes y “sonoridades completamente diversas” y nombres como Rozalén, Leiva, Joaquín Sabina y el de otro guipuzcoano: Joseba Beristain.

El cine de animación no es solo para niños

El compositor azkoitiarra ha sido nominado por primera vez al Goya por el tema Batalla, creado para la película de animación vizcaina Unicorn Wars. “Tengo muchas ganas, aunque también me da pena de que pase todo”, confiesa Beristain, que revela que ha pensado algo que decir en caso de ganar ya que así se lo han pedido desde la Academia de Cine para agilizar las entregas. “Aunque está difícil ganar estando ahí Rozalén, el hermano de Penélope Cruz –Eduardo Cruz–, Leiva y Sabina”, apunta.

A pesar de la dificultad, Beristain acudirá “con la cabeza alta” a Sevilla representado a un tipo de filme que no suele estar lo justamente reconocido en la industria. “Parece que las películas de animación solo pueden estar relegadas a su ámbito. Es sorprendente que hayan decidido nominarme, pero creo que la película podría haber competido con cualquier otra y estar más representada”, asegura sobre un trabajo que formó parte de la Sección Oficial del prestigioso Festival de Annecy y que está dirigida al público adulto.

“Parece que las películas de animación están relegadas a su ámbito. Creo que la película podría haber competido con cualquier otra y estar más representada"

Joseba Beristain - Nominado a mejor canción

“Todavía tengo que explicar a amigos que existe la animación para mayores y no solo la infantil”, asegura el compositor, que cita proyectos como Chico y Rita, Arrugas o el próximo trabajo de Pablo Berger, Robot Dreams, como ejemplos recientes. “La animación es una técnica y no un género”, añade, confesando que trabajar para un largometraje de animación dirigido al público adulto poco tiene que ver con el pensado para los más pequeños. “En el infantil suele haber más música, que se acompaña mucho con la imagen. Hay una necesidad mayor de generar estímulos constantemente”, aclara.

Lo que no cambia, sin embargo, es la obligación de tener que trabajar “con mucha imaginación”, ya que, como la técnica para animar cada escena supone largos periodos de tiempo, la música debe realizarse sobre storyboards en blanco y negro en los que faltan elementos claves como el tono, el color y los sonidos. Componentes más destacados si cabe en un filme como Unicorn Wars, en el que se narra una guerra entre osos y unicornios en una fábula antibélica. “Hay compositores que prefieren trabajar sin guion, pero para mí es muy importante no solo imaginarme la película, sino también conocer la película que se imagina el director”, apunta sobre un trabajo para el que ha contado con el Orfeón Donostiarra y que ha tomado como referencias a compositores como Johann Johannsson, Hildur Guðnadóttir y Ben Salisbury.

Por el momento, Beristain se siente cómodo en el mundo de la animación. De hecho, también ha sido el responsable de componer la música de uno de los cortometrajes nominados en esta categoría, Loop. Es por ello que, aunque no cierra las puertas a otros proyectos –“Me gusta el cine, así que cualquier ámbito es bienvenido”, confiesa–, cree que su futuro cercano seguirá pasando por la animación. “Tengo preferencia sobre ella y comparto un vínculo muy especial”, señala, confiando en que esa conexión se traduzca el sábado en un premio Goya.