El lehendakari, Imanol Pradales, ha pedido este lunes a los embajadores europeos su "colaboración" para que la Macrorregión Atlántica sea una realidad: "Es vital para reforzar las capacidades del arco atlántico en la Unión y para potenciar nuestros intereses en las relaciones trasatlánticas", ha dicho.
Pradales ha ofrecido una recepción a 21 embajadores de la Unión Europea acreditados en el Estado, un acto en el que, además de reclamar la oficialidad del euskera en Europa, ha apostado por transformar el modelo de gobernanza de la Unión par dar un mayor protagonismo a los pueblos y naciones sin Estado.
"Es hora de superar el actual sistema, cada vez menos apto para los nuevos tiempos, cuyo paradigma es la unanimidad, con su corolario: el veto", un mecanismo que ha sido usado "como mecanismo de bloqueo egoísta y la obtención de contrapartidas", lo que ha "obstaculizado la toma de decisiones" y ha impedido que la UE "alcance todo su potencial en la escena internacional".
"Debemos avanzar hacia un sistema de mayorías, un sistema donde los pueblos y naciones sin estado seamos parte activa de una verdadera gobernanza multinivel, basado en los principios de subsidiariedad y proporcionalidad. Urge un salto hacia un poder distribuido más justo y hacia una gobernanza colaborativa más eficaz", ha reivindicado.
El lehendakari ha defendido que los "pueblos y naciones como Euskadi" tienen "mucho que aportar al fortalecimiento de Europa" porque las alianzas entre gobiernos subestatales "pueden catapultar muchos de los proyectos transformadores, además de favorecer una mayor cohesión".
"Toca pasar de las palabras a los hechos", ha proclamado Pradales, que ha pedido que los gobiernos subestatales puedan participar en la gestión y redistribución de los fondos europeos.
Ha anunciado además que el próximo febrero Euskadi albergará una cumbre con los gobiernos de las regiones más industrializadas de Europa para analizar "la respuesta a dar a los grandes desafíos en materias como la IA, los procesadores cuánticos, las tecnologías limpias o las biociencias".
Pradales ha aprovechado la presencia los embajadores europeos para reclamar la oficialidad del euskera en la UE, una "petición de justicia lingüística que cuenta con un amplísimo respaldo social". "¿Cómo justificar ante la ciudadanía que una Unión Europea que se fundamenta en el principio de 'Unidos en la diversidad', imponga el principio de 'un Estado, una lengua'?", se ha preguntado.
La lentitud de la UE puede hacerla "irrelevante"
El lehendakari ha advertido además de que "la lentitud exasperante con la que avanza la UE puede ser nuestro camino irreversible hacia la irrelevancia" porque, según ha explicado, el mundo actual "exige mucha más velocidad, escala e intensidad".
"Cuando hay voluntad política, Europa puede responder a cualquier reto, no importa su magnitud", aunque esto "no es suficiente" porque hace falta una UE "que no esté a la expectativa y sea meramente reactiva".
"Necesitamos una Europa que reclame su lugar de liderazgo en el mundo, tome la delantera y se anticipe a los retos. Porque incluso cuando la respuesta ha sido unitaria, ha llegado tarde, tras procesos de negociaciones demasiado largos", ha lamentado Pradales en un discurso en euskera, castellano e inglés.
También ha considerado que "la falta de una posición contundente y coherente" ante determinadas situaciones "erosiona la credibilidad del proyecto europeo y lo debilita ante el resto de las potencias". En este sentido cree que la reacción comunitaria ante la "barbarie humanitaria de Gaza es un ejemplo".
"Vienen meses decisivos y para afrontarlos con éxito necesitamos una Europa con mayor autonomía política", ha expuesto el lehendakari, quien ha apelado a la UE a "ganar autonomía política y marcar la pauta ética", así como a "defender los valores que definen el modelo europeo" ante quienes los atacan tanto desde fuera como desde dentro.