El PNV va a recurrir a un emplazamiento cargado de historia y simbolismo abertzale para celebrar su Asamblea General los días 29 y 30 de marzo en Donostia. La proclamación oficial de Aitor Esteban como su nuevo presidente, la designación de los burukides del EBB y la aprobación de las ponencias tendrá lugar en el frontón Atano III, un emplazamiento escogido con toda la intencionalidad para reactivar a la militancia jeltzale y apelar a las emociones en un contexto complejo, marcado por la necesidad de reconectar con los sectores que se han alejado del partido. Ya sin margen para la sorpresa, Esteban pronunciará su primer discurso en un lugar donde la afiliación jeltzale sentirá el peso de la historia y su propio protagonismo en ella. Allí, el 18 de septiembre de 1970, Joseba Elosegi, comandante de gudaris y posteriormente senador jeltzale, llevó a cabo una impactante acción de protesta aprovechando la presencia del dictador Francisco Franco en el mundial de pelota, se quemó a lo bonzo delante de él al grito de "gora Euzkadi askatuta", y se convirtió en un símbolo dentro y fuera de los territorios vascos. Su intención era llevar el fuego de las bombas que arrasaron Gernika ante los ojos del fascismo.
Estas instalaciones acogieron también el primer discurso multitudinario de Xabier Arzalluz el 13 de junio de 1976, aunque en aquel momento se conocía como el frontón Anoeta. El mitin, como destaca el PNV, sirvió para escenificar la unidad progresista a favor de la democracia, y en él estuvieron presentes fuerzas de izquierda. Aquel fue un mitin conjunto, el primero autorizado tras la muerte del dictador, y se convocó bajo el lema “los vascos de cara al futuro”. Tomaron también la palabra Francisco Idiáquez (PCE), Enrique Múgica (PSOE) y Mariano Zufía (EKA-Partido Carlista).
Se da la circunstancia de que Esteban pronunciará su primer discurso en ese mismo lugar y precisamente en un frontón, un lugar que trae a la memoria que él mismo, como portavoz del PNV en el Congreso, remató con el Gobierno español la negociación para el reconocimiento de la oficialidad de la selección vasca de pelota.
Calendario
El 29 de marzo a las 10.00 horas comenzará el debate de las enmiendas y la aprobación de las ponencias; y el día 30, a las 10.30 horas, serán elegidos el nuevo presidente y los burukides que regirán el destino del PNV hasta 2029. El recinto abrirá al gran público a partir de las 11.30 horas, para que puedan entrar los invitados y los medios de comunicación y puedan recoger el discurso de Esteban, el único candidato que ha pasado a la segunda vuelta tras la renuncia de Andoni Ortuzar y Markel Olano. De hecho, este mismo miércoles, Ortuzar y Esteban se han sentado codo con codo en la presentación de la iniciativa Euskorpus y han acaparado los focos. Aunque el acto fue presidido por el lehendakari Pradales, Ortuzar y Esteban fueron invitados para reconocer el papel que ha desempeñado el PNV en el impulso de la digitalización del euskera. En su acuerdo a cambio de la investidura de Pedro Sánchez como presidente español, los jeltzales amarraron un compromiso para gestionar los fondos del Estado para la adaptación del euskera a la nueva era digital. Pactaron una financiación de 100 millones.
En cualquier caso, a pesar de esta justificación, fue inevitable que su presencia despertara una gran expectación y que sus sonrisas se analizaran con lupa, aunque es una fotografía que el PNV interpretó como un gesto de normalidad. La retirada de Ortuzar, el candidato más votado en la primera vuelta, pretendía evitar la división del partido, ante el importante respaldo que estaba recibiendo Aitor Esteban en los batzokis. Esteban ha insistido estos días en que el partido está unido y en que siguen siendo amigos, aunque es una obviedad que el PNV ha respirado aliviado con la decisión del todavía presidente del EBB. Ahora, la intención del PNV es mirar hacia adelante en un contexto muy complicado, marcado por el auge de EH Bildu y la escasa movilización electoral que arrastra el partido desde la pandemia del coronavirus.
Simbolismo
El PNV cerrará el miércoles de la semana que viene su segunda fase de votaciones en los batzokis, sin ningún margen para que se produzca un vuelco, aunque oficialmente su nota de prensa sigue hablando del futuro presidente sin ponerle nombre. Para los jeltzales, el frontón "reúne todos los requisitos emocionales, políticos, culturales y logísticos para albergar la cita más emblemática" del partido. El PNV recuerda la protesta de Elosegi, que estuvo 17 días en coma y después permaneció encarcelado hasta 1973; y también algunas gestas culturales, como la final de bertsolaris de 1967 con Uztapide y Xalbador, o las finales manomanistas entre Retegi I y Gorostiza o Retegi II y Galarza III.