El president catalán en funciones, Pere Aragonès, ha dicho este martes, en la que previsiblemente ha sido su última comparecencia informativa como jefe del ejecutivo, que abandonará la Generalitat "mejor" y "con más herramientas" de las que tenía en 2021, y ha reivindicado las medidas fruto del diálogo con el Gobierno, como los indultos, la amnistía y los avances en soberanía.

"Ha sido el mayor honor de mi vida", ha asegurado Aragonès desde la Galería Gótica del Palau de la Generalitat, acompañado por todos sus consellers y tras presidir la reunión semanal del Consell Executiu.

Se profundizado "más que nunca" en el diálogo

Aragonès ha destacado cómo durante esta legislatura "se ha profundizado más que nunca en la negociación y el diálogo para abordar el conflicto político", con medidas como los indultos, la derogación del delito de sedición o la aprobación de la Ley de Amnistía.

Un "diálogo" con el Estado que también ha resultado en avances "tangibles y concretos" en materias como la lengua catalana, en el inicio de un traspaso de Rodalies que se debe completar en los próximos años, en el traspaso de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV) o en acuerdos sobre financiación para investigación científica.

Aragonès ha augurado asimismo que el acuerdo cerrado por el PSC y ERC sobre financiación para que Salvador Illa sea el nuevo president será "el salto más importante en la soberanía de Catalunya" desde que se reinstauró la Generalitat.

El jefe del ejecutivo también ha dicho que "solo el tiempo dirá" si el hecho de que Cataluña vuelva a contar con un Govern socialista, tras tener presidentes independentistas desde 2011, representa o no "un cambio de época" y no solo de legislatura.