La sesión de ayer en el Senado ha dejado claro que al Gobierno español le queda un largo camino aún por recorrer respecto al terrorismo de Estado. Ayer el ministro de Interior Fernando Grande Marlaska defendió sin ningún rubor el ascenso del guardia civil Arturo Espejo destinado en el cuartel de Intxaurrondo cuando Mikel Zabalza fue detenido, torturado y asesinado. Ante PNV y Geroa Bai que le interpelaron por ello, Marlaska se centró en recordar que Espejo nunca fue ni ha sido imputado por la muerte de Zabalza.
La hermana de Mikel, Idoia Zabalza, reconoce hoy en Onda Vasca, que escuchar al ministro le ha "retrotraído" a muchos años atrás. "Me ha parecido escuchar a Barrionuevo. Escucharle (a Marlaska) hablar en esos términos parece que veladamente estaba justificando la tortura", critica.
A pesar de que estamos ante un gobierno de corte progresista, asegura que no le sorprende. "Seguramente todavía hay cosas que tapar y personas a las que defender e ideales que mantener", destaca. En este sentido, reconoce que ella y su familia están "curados de espanto".
“Llevamos 37 años desde que apareció Mikel flotando en el Bidasoa. Hemos tenido un recorrido largo y plagado de episodios de todo tipo y este es uno más”
Idoia Zabalza no tiene ninguna duda de que Arturo Espejo estaba al corriente y estuvo implicado en lo que le ocurrió a Mikel. "Cualquiera que hubiera estado destinado en Intxaurrondo", asegura.
Señala Idoia Zabalza que "la esperanza es lo último que se pierde" en relación a conocer algún día toda la verdad de que lo le pasó a Mikel. "No a corto plazo o medio pero algún día lo sabremos, seguro que sí". Ahora bien, de la misma forma es consciente que lo tendrán que seguir peleando, denunciando y exigiendo.
