El grupo municipal del PNV en Irun ha mostrado su sorpresa por la situación en la que se encuentra la Policía Municipal de Irun, a tenor de la denuncia realizada la pasada semana por los representantes del sindicato Erne en ese cuerpo y emplaza al alcalde José Antonio Santano a hacer de la seguridad ciudadano un asunto de máxima prioridad.
En concreto, a los jeltzales les llama la atención que durante muchos días la Policía Municipal “se encuentra trabajando con dos patrullas policiales para todo Irun, cuando Irun es una de las localidades con más delincuencia en toda Euskadi”.
Xabier Iridoy, portavoz municipal del PNV, extrae de la denuncia que ha hecho el sindicato el dato de que en Irun “contamos con un agente por cada 630 habitantes, cuando Errenteria cuenta con un agente por cada 470 habitantes”.
Estos números llevan al PNV a preguntarse “¿qué está pasando en Irun?” en materia de seguridad ciudadana y recuerda que el Pacto de Seguridad y Convivencia incluye “un claro compromiso y acción: mejorar la calidad del servicio de la Policía Municipal, y si para ello fuera necesario, incrementar el ratio de policía por habitante”.
A juicio de Iridoy, Irun lleva “demasiado tiempo viviendo una situación de inseguridad constante. Se ha convertido en una preocupación de los ciudadanos”. El portavoz jeltzale se pregunta “¿qué es lo que hace el alcalde?”. A la vista de los hechos, “poco o nada. No está cumpliendo con su palabra, y no está actuando con diligencia”.
El PNV cree que la seguridad “debe ser un tema prioritario en la agenda del alcalde”. Además, le solicitan que les haga llegar los estudios que, según informaciones publicadas recientemente, ha encargado el Ayuntamiento sobre esta cuestión. Al parecer, los documentos “dicen que hace falta más policía en Irun, contratados por el mismo Ayuntamiento a empresas externas”. Según Iridoy, “no puede ser que se nos esté ocultando información de ese calado. Solicitamos al gobierno municipal y al alcalde Santano que nos hagan llegar los estudios de inmediato”.
