El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha mostrado este lunes su hastío por el bloqueo "inconcebible" en la renovación de un Poder Judicial que lleva casi cuatro años ejerciendo en funciones. "Ha pasado otro año y el CGPJ todavía no se ha renovado. Hemos llegado a una situación límite", ha expresado en el acto de apertura del año judicial celebrado este mediodía en la sede del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco en Bilbao. Por su parte, el presidente del TSJPV, Iñaki Subijana, también ha hecho referencia a este embrollo al afirmar que "el estricto cumplimiento de los mandatos constitucionales" de los organismos judiciales debe ser "terreno vedado a la narrativa de la oportunidad política".

De esta manera, Urkullu se ha pronunciado sobre el bloqueo del órgano de Gobierno de los jueces y sobre el creciente "riesgo de descrédito" de esta institución que afecta a toda la Administración de Justicia, también en Euskadi, donde hay varios cargos clave sin renovar, tanto en las audiencias de Gipuzkoa y Araba como en el Tribunal Superior.

"Es una crisis institucional extendida ahora al Tribunal Constitucional, que ni siquiera es parte de Poder Judicial”, ha valorado el jefe del Ejecutivo autonómico sobre los nombramientos pendientes del TC que el sector conservador del CGPJ se niega a realizar. "Es inconcebible que esta situación se pueda seguir manteniendo más tiempo", añadía Urkullu, que ha recordado que "la gravedad de esta situación ha suscitado incluso la intervención de instancias europeas".

Por otro lado, el lehendakari ha realizado un balance positivo del primer año de las gestión de prisiones en la CAV: "En doce meses, además de gestionar una transición en sí misma muy compleja, hemos comenzado a asentar las bases del modelo penitenciario para Euskadi". A juicio de Urkullu, este modelo "aspira a humanizar las prisiones", apuesta por la resocialización e incorpora la perspectiva de la justicia restaurativa.

El presidente del TSJPV, en su intervención, también se ha referido al bloqueo de organismos judiciales como el CGPJ y ha reclamado que se cumplan estrictamente los mandatos que fija la Constitución. "A la Justicia hay que cuidarla con mimo, dejándola al margen del espacio del debate político partidista, evitando con ello trasladar una imagen equívoca que pulverice la necesidad colectiva de confianza en la independencia judicial”, ha considerado Subijana.