donostia - Con un diseño modular para ser más flexible y una tasa del 100% de alumnos colocados en el sector de la analítica de datos tras terminar el curso, el programa de Experto en Big Data y Business Intelligence de la Universidad de Deusto mantiene abierto el plazo de matriculación.
Big Data es un término muy escuchado pero, a menudo, las descripciones son bastante vagas. ¿Puede describir para quien no esté demasiado familiarizado con el ámbito en qué consiste exactamente y un ejemplo de una aplicación práctica?
-Es cierto que el concepto de Big Data tiene su complejidad y por eso a veces leemos definiciones que no nos terminan de aclarar de qué se trata. Pero explicado de forma sencilla, es esa enorme cantidad de datos que crea constantemente nuestra sociedad, cada uno de nosotros y nosotras. Imagina la de datos que generas en una mañana: cuando usas el móvil, creas datos; cuando subes una foto a Instagram, datos. Cuando utilizas Internet, cuando pasas la tarjeta del metro por el sensor, cuando haces una compra online, cuando llevas la geolocalización activada... Datos, datos y datos. Y eso es solo lo que generas tú activamente. Por supuesto, existen millones de datos que se generan automáticamente: imágenes de cámaras de vigilancia, sensores de contaminación, datos sobre consumo energético y un larguísimo etcétera. Está claro que hay datos de diferente naturaleza: privados, públicos, automáticos, no automáticos, colectivos, etc.
La clave está en que con las herramientas tradicionales, toda esa información no se podría gestionar; por lo que las nuevas tecnologías nos dan herramientas para poder sacar cosas de valor de toda esa maraña de datos.
El término Business Intelligence también está vinculado con lo anterior. ¿En qué se diferencia del Big Data?
-Sí, Business Intelligence también tiene que ver con los datos, pero se enmarca en un entorno de empresa y estaría enfocado a la toma de decisiones. Es decir, la utilización de datos de manera que estos, al ser analizados, ayuden al proceso de decisión. Una empresa que utiliza técnicas para gestionar y usar datos y después analizarlos y convertirlos en información útil para contribuir a los objetivos empresariales de la compañía, estaría aplicando Business Intelligence techniques.
¿Qué le hizo decantarse por el estudio del Big Data? ¿Cuál es su bagaje anterior?
-Antes de hacer el Experto en Investigación, Análisis y Visualización de Datos estudié un Grado en Comunicación, por lo que estaba familiarizada con el concepto de convertir datos en información y hacerla accesible a un consumidor. Me interesaba especialmente el tema de la infografía periodística y las visualizaciones, la otra manera de comunicar, que cada vez se veía más al emerger los medios digitales.
Después, me apunté a un curso llamado Bit for Change y descubrí Big Data y el periodismo de datos y nuevas tendencias como open government, transparencia, entre otras muchas cosas. Además, en Internet ya se leía mucho acerca de este nuevo fenómeno. Recuerdo haber leído cosas como Big Data ha llegado para quedarse y tenía mucha curiosidad por entender qué era eso. Por ello decidí apuntarme, ya que me parecía un campo con mucho futuro y lo que es mejor, con posibilidad de aplicarlo en diferentes ámbitos, lo que me pareció un valor añadido. Yo lo enlacé desde el principio con mis estudios previos; con el ámbito de la comunicación, pero habrá mucha gente que le vea potencial en otros ámbitos totalmente diferentes.
Describa el proyecto en el que actualmente está trabajando.
-En este momento estoy estudiando un Máster en Derechos Humanos y Democratización y estoy profundizando en el proyecto que empecé en el Experto, aunque he cambiado algunas cositas del enfoque original para hacerlo más factible y adaptarlo a los requisitos de mi tesis.
Básicamente lo que quiero es analizar si existe cierta incoherencia en la política exterior de la UE por el hecho de que países miembros de la Unión efectúen venta de armas a estados que son parte de conflictos armados y después la UE, como conjunto; lleve a cabo sus operaciones de envío de ayuda humanitaria y reconstrucción. Es decir, ver si es coherente vender armas a un país X y después mandar millones de ayuda humanitaria al país que sufre las consecuencias de ese conflicto armado. Y claro, ahí entran en juego los datos. Por un lado, la venta de armamento: cifras de exportación, destinatarios, tipología de armamento, fechas.... Hay, digamos, una parte más mecánica y luego una parte de análisis crítico que tiene que hacer cada uno; se trata de convertir esos datos en información que aporte algo. Esta claro que de los datos se pueden sacar historias, pero requieren que una persona los ordene, analice e interprete primero.
¿Recomendaría estos estudios? ¿Por qué? ¿Qué tipo de salidas profesionales ofrecen?
-Sí, lo recomendaría porque puede tener una aplicación muy diferente. Yo lo enfoco al periodismo, y ahora a los Derechos Humanos, pero seguro que hay gente que le encuentra aplicaciones muy diferentes.
¿Qué habilidades personales son aconsejables para dedicarse al Big Data?
-En mi experiencia tuve que aprender a utilizar herramientas para limpiar datos, que es el paso previo antes de empezar, para poder trabajar bien luego. Eliminar fallos ortográficos, nombres que se refieren a lo mismo pero con diferentes términos, etc. También aprendimos a utilizar herramientas de análisis de datos. En esta fase, saber algo de estadística me hubiera venido genial Y finalmente, para la visualización, hay herramientas más intuitivas y te puedes apañar fácilmente; y otras en las que el conocimiento de código e informática son necesarios. Siempre nos quedan los tutoriales de YouTube...
¿En qué nichos de mercado cree que podría instalarse y crecer el Big Data? ¿Lo considera una profesión con futuro?
-Yo veo un potencial importante para las instituciones, que podrán mejorar la administración y gestión de las ciudades, en temas de eficiencia, de consumo, etc. Un ejemplo son las smart cities.
Las empresas dedicadas a la producción de bienes de consumo que decidan hacer data management, gestionar de alguna manera todos los datos que están a su disponibilidad, podrán tener oportunidades de negocio nuevas o diferentes. Por ejemplo, si estudian las tendencias de comportamiento de los clientes (y podrían hacerlo a través de un montón de indicadores diferentes), podrán adaptar su oferta a ellas; también podrán hacer combinaciones de información que hasta ahora no se han hecho y de ahí pueden nacer nuevos servicios, etc.
Los medios de comunicación son, en mi opinión, otros posibles beneficiarios del potencial de Big Data.
Y por último, Big Data puede dar lugar a la creación de nuevas apps para móvil, cosa que ya vemos en la actualidad: las apps para ver el tiempo, las apps que te ayudan a ahorrar, las que te encuentran la canción que está sonando, las que te dicen el camino más corto para llegar a un lugar, etc.- N.G.