Burdeos - Viajar en tren desde Baiona hasta Donostia sin bajarse del vagón será una realidad en 2017. El presidente de Aquitania, Alain Rousset, avanzó ayer al término de la cumbre celebrada con el lehendakari, Iñigo Urkullu, que espera que en el plazo de dos años esté concluido el denominado tercer hilo que, con el mismo de ancho de vía, conecte las principales capitales de la Eurorregión, incluidas Bilbao y Burdeos.

"Se trata de un desarrollo extraordinario", exclamó Rousset ante los medios tras la reunión con los representantes del Gobierno Vasco. El presidente de Aquitania alabó la posibilidad de "coger el tren en Burdeos y bajar en San Sebastián" y recordó cómo para acudir hasta Bilbao, emplea más tres horas en coche y casi ocho en tren: "Con el Tren de Alta Velocidad, bastarán 1 hora y 40 minutos".

El tercer hilo ferroviario que ya se construye entre Irun y Donostia permitirá que los convoyes de alta velocidad se conecten con el resto de Europa por Hendaia hasta que el trazado definitivo del TAV se ejecute a ambos lados del Bidasoa y ayudará, además, a que los mismos trenes puedan circular desde Burdeos hasta la capital guipuzcoana, como avanzó Rousset.

El presidente aquitano consideró que esas líneas eurorregionales pueden ser realidad como mucho en 2016 o 2017. Esta posibilidad evitaría tener que llevar a cabo lo que en el sector del transporte se conoce como una ruptura de carga, esto es, permitiría que tanto las mercancías como los pasajeros puedan continuar hasta su destino sin tener que cambiarse de vagón.

Antes de que esta opción sea realidad, avanzó Rousset, desde junio y todos los días tres regionales franceses (conocidos como TER) tendrán la estación de Irun como destino en lugar de concluir su trayecto en Hendaia, lo que también podría ocurrir con otros tantos servicios de Cercanías.

Esta opción permitiría, a su vez y mientras la línea única sea imposible, un trasbordo más sencillo entre las líneas de Renfe y SNCF, circunstancia que sí ocurre a día de hoy entre la ferroviaria gala y EuskoTren en Hendaia, donde ambas estaciones son contiguas.

Alta velocidad La de las líneas regionales entre ambos lados del Bidasoa es una iniciativa encuadrada en el Plan Estratético Aquitania-Euskadi 2020, según ha podido saber este diario, aunque la apuesta ferroviaria más consolidada es la de la alta velocidad.

En este sentido, el nuevo presidente de la Eurorregión y lehendakari, Iñigo Urkullu, reclamó de nuevo "la implicación de las instancias europeas" en el proyecto del TAV, "una prioridad para el eje atlántico". De esta manera, aseguró Urkullu, se garantizaría "la conexión de la Y vasca con Aquitania" y se aseguraría "su continuidad con Europa".

En la última cumbre plenaria de la Eurorregión, celebrada el año pasado en Vitoria, Aquitania se comprometió a presionar al Gobierno francés para que no demorara hasta 2030 las obras entre Burdeos y Hendaia.

El Ejecutivo de Iñigo Urkullu, por su parte, reclamó al presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, a que presionara a su homólogo galo en este mismo sentido ante el riesgo de que una parte de la obra esté concluida y la que le debe de dar continuidad hacia Europa, se encuentre sin empezar.