Donostia. El colectivo de familiares de presos de ETA Etxerat cree "urgente" poner fin a la "dispersión" de los reclusos de la organización terrorista que, según sus datos, ha provocado ya dieciséis muertes en las carreteras.

Los miembros de Etxerat Maite Ormazabal y Julio Güemes denunciaron "el acoso" que sufren los allegados de estos reclusos que, en su opinión, es de una "gravedad indiscutible". Pusieron como ejemplo el caso de Enara Rodríguez, quien interpuso anteayer una denuncia ante los juzgados de Donostia por el acoso, la violencia y las amenazas a las que supuestamente le sometieron dos hombres que le mostraron una placa, que "cree que era de la Policía Nacional", cuando regresaba en coche de visitar en la cárcel de Logroño a su hermano Arkaitz.

Según su relato, los hechos ocurrieron el 28 de septiembre, en la autovía A-12, en dirección a Pamplona, cuando dos varones a bordo de un turismo invadieron su carril hasta que ella perdió el control de su vehículo, la sacaron del pelo, amenazaron con violarla y después le dieron cinco minutos para huir.