Tras proclamarse campeón del Cuatro y Medio en Bilbao, el navarro Unai Laso atendió a los medios en el Frontón López del barrio de Iturrama, donde declaró estar “muy contento” con la txapela de campeón de la jaula, y valoró el “gran sufrimiento” que supuso el partido contra el también navarro Peio Etxeberria, aunque admitió que “ambos” merecían ganar el campeonato.

“Estoy muy contento. Sufrí durante todo el día y aun sigo medio emocionado por todo lo que pasó ayer (por este domingo), pero estoy contento”, declaraba Unai Laso, campeón del Cuatro y Medio, y admite que en el encuentro frente a Etxeberria no disfrutó “nada”, ya que estuvo “fuera de la cancha” en varios momentos del partido. De todos modos, el navarro explicó que de juego se sintió “muy bien”, algo que notó “durante todo el campeonato”. “Mentalmente me vinieron un poco los fantasmas, los malos pensamientos, aunque creo que Jon (Mariezkurrena) hizo un gran trabajo. Confiaba en mí más que yo en algunos momentos del partido. Entre todos hemos ganado esta txapela”, admitió el pelotari navarro.

Sobreponerse

Laso también habló del transcurso del partido. En un principio, el resultado se puso de cara para su rival, llegando a estar cinco tantos por debajo, aunque consiguió “sobreponerse” para llegar al 22-19 definitivo: “Empiezas perdiendo el partido, que ya te ha pasado otras veces, y al final darle la vuelta a eso pues es complicado”, relataba el de Bizkarreta-Gerendiain. Laso agradeció el “trabajo con la psicóloga” que realizó de cara a la final, y con un trabajo de “todos los días” de toda la gente que tiene detrás el navarro: “En días puntuales hay que hacer ese trabajo. Es ese momento o ninguno, y la verdad que al final ha salido bien, y estoy muy contento”.

Laso tuvo palabras de alabanza hacia su rival, Peio Etxeberria, y explicó que le puso contra las cuerdas en varios momentos de su duelo en Bilbao: “Lo hizo muy bien. Me sentía incómodo en todo el partido, le daba mucho a la pelota. Con la izquierda me metió a la contracancha muchísimas veces, y al final eso en el Cuatro y Medio es lo más importante. Peio hizo un gran partido, y se merecía la txapela igual que yo, pero ya le dije que esta txapela solo la podía ganar uno”.

Parejas

De todos modos, la pelota no espera ni por el campeón del Cuatro y Medio, ya que la competición por parejas es el próximo torneo en la agenda del navarro: “Esta txapela significa mucho, ha sido increíble y hay que disfrutar el momento”. Con la presentación de hoy del Campeonato por parejas, Laso sabe que es el momento de “volver a la vida normal” en los frontones: “Ayer fue todo como un sueño, pero ahora toca volver y entrenar de nuevo”.

Laso pronunciaba sus palabras entre las paredes del Frontón López, uno de los primeros que tuvo el privilegio de ver a Laso pasar el tiempo con sus amigos y en competiciones oficiales: “Los aitas viven cerca, entonces venía aquí muchas veces. He vivido aquí muchos momentos, más que competiciones oficiales pues momentos con los amigos. Tengo recuerdos muy bonitos de aquí”.

Unai Laso se abraza a su aita Javier Bergasa

A pesar de los momentos agónicos durante la gran final del Cuatro y Medio, Laso cerraba la herida de la final que disputó contra Altuna en la que perdió 22-5. Esto, sumada a la alta intensidad del encuentro, lo dejó “muy emocionado” tras el partido, apoyándose en la pared y soltando “alguna lágrima” tras todo el esfuerzo para llevarse la txapela: “Al final, y como es normal, me emocioné. Me vinieron a la cabeza todas las personas que han estado en los malos momentos, sobre todo, y hay que llorar. Pocas veces lloro, debería llorar más, y tras la final la verdad que lo solté y estoy muy contento”. Esa alegría se plasmó con todas las personas cercanas al navarro que le acompañaron durante la final: “Soy muy sentimental, me gusta agradecer a todo el mundo y creo que tenía que darle las gracias a todos cuando entré al vestuario, después de lo que he conseguido”.

Momentos duros

La victoria de Laso cobra más relevancia tras todos los momentos difíciles que ha tenido que superar para estar en el torneo y llevándose la txapela: “Me recuperé bien de la lesión. Al final siempre tenemos molestias, pequeñas lesiones que no se dicen nunca... A los 40 o 50 no sé cómo estaremos... pero cascaos seguro”, declaraba el de Biskarret-Gerindain entre risas.

Laso se manifestaba “muy orgulloso de todo” en la final del Cuatro y Medio: “Le hemos conseguido dar la vuelta a una sensación mala que teníamos en la cabeza y creo que tuve que pasar momentos duros durante el partido, pero tuve que aprender a darle la vuelta. Al final, aunque la cosa se ponga negra debes cambiar el juego como puedas e intentar ganar de alguna otra forma”.

Con el reto de un nuevo torneo por delante, tras todo el lastre de ser el último en pie en el Cuatro y Medio, Laso sabe que “es muy complicado”, a pesar de haber llegado a varias finales, algo que el pelotari navarro le parece “mucho” de por sí. Laso logró por fín la ansiada txapela que se le negó años atrás con el duro varapalo frente a Altuna, y enmarca su nombre en la historia de la competición, sabiendo que la jaula tiene nuevo campeón, y que dentro de poco estará compitiendo por parejas para llevarse un torneo al que le tiene “muchas ganas”, pero con los pies en el suelo tras llevarse la txapela.