Mención a Blanco - Ha triunfado el espontáneo que el sábado pasado se presentó ante Sánchez con un cartel en que se leía “Que te vote Txapote”. Buena parte de los amanuenses diestros han titulado así sus descargas esta semana. Uno de ellos, el ciudadano rebotado Juan Carlos Girauta, añadía en ABC: “Que le vote Txapote y que le voten los incapaces de entender que, en la historia de un pueblo, veinticinco años no son nada, y que si se trataba de acabar haciendo lo que exigía la ETA para no matar a Miguel Ángel Blanco, mejor hacerlo entonces y salvarlo”.
Ongi Etorri - También en el vetusto diario, José F. Peláez traía a colación el cartelón y se adornaba así: “Quizá cuando la gira de Sánchez llegue a Galdácano, a Pedro le reciban con vítores y un orfeón, no lo sé. Pero lo merecería: nadie ha hecho tanto para blanquear a ETA como él. Cuando Bildu es tu socio, todo acercamiento se vuelve sospechoso. Y cuando desprecias así a un pueblo, la gira por la absolución acaba recordando a un Ongi Etorri”.
Las llaves de las cárceles- Desde el diario catolicón El Debate, Antonio R. Naranjo levanta la mano para añadir a la riada de bilis otro clásico del ultramonte: “Sánchez le ha dado a Urkullu las llaves de las celdas, ha mirado para otro lado y el PNV las va abriendo, sin gran oposición judicial por venir bien engrasados los expedientes, para permitir que matarifes sin arrepentimiento alguno vuelvan a sus pueblos y sean recibidos como héroes: los nacionalistas tragan porque compiten con los abertzales por una parte de la clientela”.
No se le acerca - Y ahí enlazamos con lo de las prisiones vascas, que no son de este mundo. O, por lo menos, de esta península, según anota Óscar Monsalvo en Vozpópuli: “Lo primero que hay que recordar en un momento como este es que en España existen cárceles españolas y cárceles vascas. Txapote no va sencillamente a una cárcel más cercana a su lugar de nacimiento, sino que deja de pertenecer al sistema penitenciario español. No se le acerca, sino que se le transfiere”. El regalo final es para un político y un periodista que comparten apellido: “Lo que nos ha traído hasta aquí ha sido la confluencia de los López. Los Iñaki, los Patxi. Los que nunca miran y los que ya han olvidado algo que nunca quisieron saber”.
