Síguenos en redes sociales:

La manipulación de TVE, a Europa

esta semana hemos conocido que el Estado español sigue subiendo en el listado de los países con mayor corrupción. Un descenso a las tinieblas que no se ve reflejado desde luego en la información de los medios en general y, en especial, en los medios públicos. El caso de TVE es paradigmático. La comparecencia judicial del El Bigotes se despachó como si fuera un breve de un tema menor. El otro día en el Senado el responsable del ente, el varias veces reprobado José Antonio Sánchez Domínguez, camufló el veto al periodista Gaizka Villate, redactor de TVE en la CAV. Dijo que más que no gustarles lo que decía no les gustaba cómo vestía y que por eso no quieren que haga informaciones en directo. Y se quedó tan ancho. Ahora también hemos conocido que esta fama les precede y que estas prácticas de la televisión pública van a llegar hasta el Parlamento Europeo. Aquí van a mirar si lo que practican es lo que en todo el mundo se conoce como manipulación. Si lo que omiten o se guardan es pura y llanamente lo que siempre se ha conocido como censura. La iniciativa ha partido del Consejo de Informativos que es el órgano que se ve obligado a defender a los periodistas de su propia empresa y, con ellos, también a los espectadores que, como en todos los países democráticos, tienen derecho a unos medios públicos lo más objetivos, plurales e imparciales posible. A estas alturas del partido, con los cientos de casos de corrupción anegando el campo donde se juega a lo que se juegue, existe la impresión de que no pasa nada si se sigue utilizando la tele pública porque el que venga luego hará lo mismo. Y esto es lo que no se puede permitir: confundir, camuflar, borrar la libertad y ofrecer la versión de que informar es lo mismo que ocultar, solo que, eso sí, poniéndose el traje adecuado. A ver Europa si sigue mirando para otro lado o no.