Estamos a tiempo de hacer un programa de televisión. Se lo digo en serio. Incluso a aquellos que nunca se la habían propuesto. Ayer salía la noticia de que Movistar tiene un montón de millones esperando a invertirlos en filmes y series televisivos. Bueno y si no, también podemos hacer un guión cogiendo las páginas del corazón. Ya sé que no es una idea muy original pero parece que a los de la cadena de DKiss les ha parecido una idea genial. Piensen por ejemplo en una protagonista. Elíjanla por orden alfabético por ejemplo Ana. Si duda entre Ana Belén o Ana Obregón entonces comience a dudar de sus dotes de creador televisivo. En efecto, la respuesta correcta era Ana Obregón. Digamos que la idea es un documento sobre el día a día de la actriz y personaje de Semana, Hola, Lecturas, etc. Pónganle un título y para ello no se corte en copiarlo descaradamente. Del algo pasa con Mary quítenle lo de Mary y escriban con un par: Algo pasa con Ana. Ya casi lo tenemos. Pongan unos cámaras persiguiéndola en su día a día y ya está. Tan sencillo como una de las recetas de Arguiñano. Luego lo presentan a algún festival como el de Vitoria que aunque se acabó ayer, luego suelen hacer otra edición en el Mediterráneo supongo que por cuestiones meteorológicas. En el festival hay que pedir a la protagonista absoluta que vaya de divina y que diga alguna frase ocurrente y ya estará todo el marketing hecho. Ana Obregón así lo hizo esta semana en Gasteiz. En un alarde de sinceridad reconoció que “me ha costado muy poco tener a la cámara siguiéndome, porque llevo 35 años de ensayos”. Pues ya ven. La televisión actual no tiene secretos. Ya sé que el Algo pasa con Ana está hecha, pero piensen en la cantidad de famosos y famosas a las que se les puede seguir la pistas en las revistas y luego hacerles un programa de televisión en exclusiva. O mejor piensen un poco más a ver si dan con una idea de verdad.
