Como somos catalanes pues somos europeos, o al revés. No sé, algo así afirmó Felipe VI en su histórico discurso en el Parlamento Europeo. Felipe como actor de televisión tiene un problema y es que le suele fallar la voz en estos actos tan importantes. A mí me pasa lo mismo y por eso, aunque no me ponga de su parte, comprendo la mala leche que tenía que tener ayer. Salió en todos los telediarios y en casi todos soltaba varios gallos, un tono entre castrati y eterno adolescente por el que a uno le cuesta creer lo que dice Felipe. También puede ser que en su tono institucional este hombre no quiera decir nada, y eso es lo peor. Algo así vino haciendo su padre Juan Carlos hasta que se le rompió la pierna después de la más famosa cacería de elefante que en la historia ha habido.
Y a los que no se termina de conocer el por qué de sus decisiones son los programadores de Mediaset (Cuatro y Telecinco). Ahora han dicho que no siguen haciendo la serie Anclados porque no tuvieron día bueno entre las acusaciones que recibieron por parte de las asociaciones de niños con cáncer y del mundo gitano, que sentían denigrantes el papel que les habían reservado en esos guiones. Lo cierto es que, a pesar de críticas y críticos, la serie cosechó el año pasado magníficos resultados de audiencia. Y eso es algo que siempre nos hace pensar a los profesionales que nos dedicamos a esto. Pero hacen bien en Mediaset en no hacer ni un capítulo más, por más que les hayan dicho que la serie era muy buena, ya que también tenía mala continuidad y los argumentos donde podría sacar agua acabarían por echar encima a varios espectadores. Una serie no siempre se retira cuando no la ve ni dios. No. Hay series que Telecinco retiró en su momento porque, a pesar de que las veía mucha gente, ya no tenían un pase como 7 vidas y Aida. Hay otras series que, objetivamente, -como Gym Tony-, tienen los días contados, pero va a ser que con la lucha por las audiencias no les dejan irse.