Rajoy, a tus mentiras ¿les aplicamos el 21%?

YA somos más pobres. Desde hoy ir al cine o al teatro ha sido penalizado. Y que nos den. A partir de ahora quienes tengan inquietudes culturales tendrán que pagarlas a doblón. Eso sí, mientras todo el mundo aguardaba a que llegara septiembre para cambiar los impuestos, las grandes compañías como Movistar facturaban el IVA al 21% en el mes de agosto mandándote un aviso de que eso se puede hacer. Son los más listos del lugar y nadie hace nada para evitarlo. Los ciudadanos llevamos la marca de la diana. Gracias a las nuevas medidas económicas, la economía actual es una cacería de las clases medias en la que el liberalismo nutre a discreción de escopetas y redes a sus forofos. Es cuestión de que sus medidas acierten con la puntería más que otra cosa: a ver quién apunta mejor o con el arrastre indiscriminado atrapa más cantidad de incautos consumidores.

La tele es otro de los instrumentos. De todas las ofertas solo las relacionadas con el fútbol sacan pecho. En un país saturado de partidos del siglo con estos datos económicos, las figuras de Ronaldo y Messi son lo más parecido al eccehomo restaurado en la iglesia de Borja. El humor que estos días pulula por televisión se parece a los monstruos de Goya. Hoy programas como Tú si que vales, que junto a Risto Mejide ficha a Maxi, el que hace de portero en La que se avecina, para que la gente convierta sus habilidades en puro circo. Ayer en los informativos anunciaban que De Guindos entregaba la última recaudación a Bankia. Si quieres ser testigo del esperpento de este país que arde mientras los ministros se van de vacaciones no tienes más que mirar las imágenes de TV de los satélites en los espacios del tiempo. Ojo. Es la hora de la firmeza. A estos ataques hay que responder salvando la cultura y la verdad de todos estos buitres.