Vender el cerdo

acabado El conquistador del fin del mundo, le ha sucedido El conquistour. Una manera de mandar a hacer ferias a los concursantes y tener de paso una horas de programación para el verano. Una iniciativa que tuvo su momento delicado en Estella-Lizarra y que a punto estuvo de acabar en tragedia una embestida de una vaca brava a un concursante. El pasado domingo la cita fue en Arre y allí colgaron del puente el famoso cerdo abierto en canal del que tendrían que arrancar a mordiscos trozos de carne para superar la prueba. Digo tendrían porque apagué la tele en busca de un poco de sosiego. Concursantes arrancando a mordiscos las vísceras es una escena que seleccionaran todas las televisiones del mundo como momento friki que deja los concursos macabros japoneses como juegos del jardín de infancia. Julian Iantzi hablaba de él como un clásico. Sí que habla claro de la dureza del concurso, pero supera varias barreras del sentido común.

Telecinco también comenzó ayer la programación veraniega con Pilar Rubio y Corbacho. Una pareja hecha con los descartes que durante el curso hicieron de sus programas sendos fracasos. Con el concurso buscan nuevos frikis y encantadores de serpientes con los que sustituir en el futuro las vacaciones de los componentes de Sálvame y así. El verano hace estragos en televisión. La oferta más interesante pudiera ser el programa de Julia Otero. Pero mucho me temo que esta vez las entrevistas a la carta son más promocionales que otra cosa. Más que querer conocer a sus entrevistados, estos van a vender su libro y, de paso, pregunte usted lo que quiera señora Julia. Ayer, Alejandro Sanz. Justo cuando estrena disco. Vaya con la casualidad. Más que personajes de interés por aquí aparecen artistas con interés en que les compremos.