De silencio
Mi solidaridad con el simbólico minuto de silencio de las radios como protesta por la pasta que les quieren cobrar los clubes. El fútbol no sería tanto sin esos carruseles radiofónicos que vienen llenando la historia más reciente. Las narraciones exultantes, los gritos agónicos tras los goles, esas entrevistas larguísimas en las que jugadores y entrenadores repiten "fútbol es fútbol" y los más profundos añaden "el fútbol es así". Qué raro se harían los fines de semana sin "minuto y resultado" y esas grandes voces de la radio capaces de captar la atención de millones de oyentes con la tensión narrativa de las jugadas. Buena parte de la televisión que se ve hoy ha copiado de la radio. Esos programas río donde el forofo está por encima del periodista y siempre se habla de la monserga del Madrid y del Barça, lejos de entrar en decadencia están proliferando como las setas. Los argumentos futbolísticos son tan esenciales como simples y parece que, por mucho que se repitan a diario, no terminan de aburrir al respetable.
Y hablando de gritos: Klaudio Landa, el conductor de Ni más ni menos en ETB2, ha logrado recuperar el tono de Pásalo, aquel mítico programa vespertino de Adela González e Iñaki López que fueron sustituidos por el ego radiofónico de Antxon Urrusolo. Klaudio se las ve solo ante el peligro con unos invitados que han perdido fuste. Los gritos de Klaudio son constantes da lo mismo que pida silencio o de paso a las llamadas del público. Chocan a la hora sagrada de la siesta. Uno no sabe si eso de hablar con el tono de voz tan alto esconde alguna sordera precoz o es un tic nervioso. El caso es que se acaba trasladando y llega al espectador que cambia de canal. En el fondo lo que apetece a esas horas es, ni más ni menos, que echarse una cabezada.