Lapidaria. Ningún territorio español se saldrá de la sacrosanta unidad patria. “Ateneos a las consecuencias”. Esta frase es de los hijos de la intransigente, cutre, intolerante y antidemocrática España.

Multitud. Unos vizcainos españolistas, presumiendo de liberales, solicitaban un homenaje a aquella multitud de aguerridos que lucharon para que nuestras mujeres no usaran el velo y su religión no fuera el Islam. Parece ser que eran unos veinte mercenarios vizcainos. Menos multitud y más coherencia.

Mayor Oreja. “No puedo condenar el régimen franquista cuando con él se vivía muy bien”. Una realidad. “Franco ha muerto. El franquismo no”.

Eibar republicana. 14 de abril de 1937. “No tenemos telégrafo. Entones, icemos la bandera republicana en el Ayuntamiento”.

Regionalismo. “El reto del nacionalismo vasco no está en la independencia sino en encontrar el alma vasca”. (Alberto Pradera, exdiputado general de Bizkaia).

“El fin del nacionalismo es el estatuto.” (Ardanza, lehendakari, en su conferencia en el Club Siglo XXI).

Odio y rencor. “Vámonos de este puto país”. (Rubén Múgica, hijo de Fernando, asesinado por ETA). “Ni olvido ni perdono”. (Enrique, hermano de Fernando).

La Constitución. Cárcel del pueblo vasco. (Josu Pagai). “ETA no generó la violencia sino la violencia la engendró”. (Telesforo.Monzón)

Petición al Señor. Misa de Navidad, ocho y media de 2011. Iglesia de los Agustinos de Bilbao. “Pedimos por el Rey, la familia real, por Bilbao y por nuestra patria España”.

Tratamiento a nuestras tierras. El anterior régimen nos denominaba las “españolísimas provincias vascongadas”. Falso españolismo. España, portadora de los valores espirituales de Occidente y Franco por la gracia de Dios.

Los alardes de San Marcial se celebran como un triunfo de España, que no existía como ente político, sobre Francia, cuando en realidad fue un enfrentamiento entre Castilla y los navarros que intentaron recuperar su soberanía, con el apoyo de los mercenarios gascones. La anexión de Navarra a Castilla no fue conquista ni invadida, sino una unión voluntaria y amistosa. (Los navarristas o falsos navarros).