Podrá resultar más o menos simpático, que se lo consulten a Ana Obregón o a Cristina Pedroche (víctimas de sus afilados comentarios durante la pasada Nochevieja), pero lo cierto es que Risto Mejide entrevista mejor que nadie. Quizá no roza el nivel místico del inmortal Jesús Quintero (El loco de la colina), pero logra el mismo efecto televisivo que Bertín Osborne: generar tal clima de confianza en plató que el entrevistado-protagonista llega a desnudarse por completo. A narrar con todo lujo de detalles lo que jamás contaría ante la presencia de una Ana Pastor o de un Vicente Vallés, por poner dos ejemplos de periodismo intenso. 

Y así lo hizo también, por supuesto, la Baronesa Thyssen en un tú a tú cargado de exclusivas, arte, perlitas de amor e incluso enfrentamientos directos con su hijo Borja. Carmen Cervera, durante su intensa charla con Mejide, que por cierto logró amplio respaldo por parte de la audiencia (un 9,5% de share), hizo saltar por los aires el aparente buen rollo familiar con su hijo y su nuera Blanca Cuesta. "Con Borja era una cosa preciosa... no me soltaba un minuto, pero cuando cumplió los 19 años cambió de vida. Y las madres esperamos que haya una transformación. Yo he intentado favorecer ese cambio mil veces, pero las personas que están a su lado tienen otra mentalidad. No son como era Borja ni como soy yo...", son las palabras que utilizó Tita ante Risto.

Eso sí, si hubo (o mejor dicho no hubo) un momento sobre el que se han escrito estos días ríos y ríos de tinta, ese fue la ausencia en el programa de la gran pregunta (y respuesta) que todos esperábamos: "¿El padre de tus hijas es Borja?".

 Tal y como habían anunciado las promociones del conocido formato de entrevistas. Pero la cuestión nunca llegó a resonar en directo. ¡Jamás! Mediaset decidió eliminarla y no se emitió. ¿El motivo? Tras la controvertida pregunta Tita se derrumbó, por lo que Mejide decidió zanjar el espinoso asunto y pasar a cuestiones más amables. Así, al menos, lo certifica la revista Semana