La mujer polaca que afirma ser la niña británica desaparecida en 2007 Madeleine McCann ha sido declarada culpable de acosar a los padres de la pequeña, Kate y Gerry McCann, según decidió este martes por unanimidad un jurado popular del Tribunal de la Corona de Leicester (centro de Inglaterra).
Julia Wandelt, de 24 años, estaba acusada asimismo de acechar a la familia McCann causando grave alarma o angustia, si bien fue absuelta de esos cargos, más graves que el de acoso.
Culpable de acoso
Junto a la joven polaca, la fiscalía había acusado también por acoso y acecho por enviar cartas y acudir al domicilio de los McCann a la galesa Karen Spragg, de 61 años, quien fue declarada no culpable de todos los cargos.
Tras recibir los veredictos, el juez indicó que la pena máxima por el tipo de acoso constatado son seis meses de cárcel, aunque recordó que Wandelt ha superado ese periodo al permanecer bajo custodia desde que fue arrestada el pasado febrero en el aeropuerto de Bristol (suroeste de Inglaterra)
Durante el juicio, la acusación aportó pruebas de que Wandelt se presentó en repetidas ocasiones en el domicilio familiar de los McCann, les envió cartas de contenido "siniestro" e insistió en que accedieran a efectuar pruebas de ADN.
La condenada declaró que recordaba, gracias a sesiones de hipnosis, su vida con Kate, Gerry y sus hermanos menores, así como el momento en que fue secuestrada en Portugal en 2007 y fue llevada a Polonia para ser explotada sexualmente con otras menores.
La fiscalía relató que en un solo día, el 13 de abril de 2024, Wandelt trató de comunicarse con Kate McCann en más de 60 ocasiones a través de llamadas y mensajes.
Wandelt se convirtió en una sensación en internet en febrero de 2023 cuando publicó en Instagram con la cuenta '@IAmMadeleineMcCann' y apareció en programas televisivos hablando de la posibilidad de ser la niña desaparecida a los 3 años en Portugal.
El 3 de mayo de 2007 Madeleine McCann desapareció del apartamento en el que dormía con sus dos hermanos gemelos, de dos años, en Praia da Luz, mientras sus padres cenaban con amigos a pocos metros de distancia en el complejo vacacional portugués.
En 2020 la Policía alemana declaró a Christian Brückner como el principal sospechoso del secuestro y asesinato de la pequeña, pero no se formalizaron cargos. El caso de Madeleine fue uno de los más mediáticos del mundo y sus padres mantienen la campaña para que prosigan las investigaciones para encontrarla.