El Gobierno de Israel reclamó ayer a “las naciones del mundo civilizado” que se opongan a la petición de la Fiscalía del Tribunal Penal Internacional (TPI) para la emisión de órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, por presuntos crímenes de guerra en la Franja de Gaza y que anuncien públicamente que, si llegan a ser emitidas, no procederán a detener a estas personas.
"Mundo libre"
“Pedimos a las naciones del mundo libre y civilizado que estén del lado de Israel y condenen firmemente este paso”, dijo la portavoz de la oficina de Netanyahu, Tal Heinrich, en una rueda de prensa retransmitida a través de YouTube. “Asegúrense de que el TPI entiende su posición. Opónganse a la decisión de la Fiscalía del TPI y declaren que, incluso si se emiten órdenes de arresto, no van a ser aplicadas”, manifestó.
“No va de nuestros líderes, va de nuestra supervivencia, como Estado de Israel: judíos, cristianos y musulmanes que se niegan a morir a manos de terroristas”, recalcó al tiempo que volvió a tildar de “indignante” la decisión del fiscal jefe del TPI, Karim Khan, de reclamar la emisión de estas órdenes de arresto contra “líderes democráticamente electos”. “Es una burla al Derecho Internacional”, agregó.
“No va de nuestros líderes, va de nuestra supervivencia"
Derecho de autodefensa
Así, argumentó que la petición de Khan “es una difamación que busca únicamente evitar que Israel ejerza su derecho a la autodefensa en una de las guerras más justificadas en los tiempos modernos, frente a una amenaza genocida llamada Hamás”. “Es una guerra que no empezamos y no queríamos”, señaló.
“No hay poder en el mundo que nos impida traer de vuelta a todos los rehenes y derrocar el régimen terrorista de Hamás. No hay poder en el mundo que diga a las madres israelíes que dejen de luchar por sus hijas, que sufren abusos sexuales a manos de los monstruos de Hamás. No hay poder en el mundo que nos empuje a cometer un suicidio público y dejemos de defendernos sólo para satisfacer a los antisemitas”, dijo.
Derecho Internacional
Heinrich reiteró además que “Israel cumple al cien por cien el Derecho Internacional” y afirmó que las acusaciones vertidas por Khan derivan de “una total distorsión de la realidad”. “Israel no ataca a civiles en Gaza, nuestra lucha es contra Hamás. Como en todas las guerras a lo largo de la historia, hay trágicos daños colaterales, causados por los enfermizos métodos de Hamás”, apostilló.
En este sentido, acusó al fiscal jefe del TPI de “perpetuar la guerra” y de “no promover ninguna expectativa de paz”. “No busca justicia, busca una continuación de una realidad en la que los israelíes pueden ser asesinados, violados y quemados”, zanjó.
EEUU, Francia y Polonia
Por otro lado, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, prometió ayer que trabajará con el Congreso para dar una “respuesta adecuada” a la decisión del fiscal del Tribunal Penal Internacional (TPI).
Durante una audiencia ante un comité del Senado, Blinken arremetió contra la “vergonzosa comparación implícita entre Hamás y los líderes israelíes”. “Esta decisión está totalmente equivocada. Estaremos encantados de trabajar con el Congreso y con este comité para encontrar una repuesta adecuada”, dijo el jefe de la diplomacia estadounidense.
Asimismo, las autoridades de Polonia y Francia criticaron ayer las “comparaciones” entre Israel y Hamás. El primer ministro polaco, Donald Tusk, manifestó que es “inaceptable” la comparación trazada “entre los líderes de una organización terrorista y el primer ministro de Israel”, si bien admitió que la “evolución política de Netanyahu suscita escepticismo sobre lo que hace”.
Por su parte, el ministro de Exteriores francés, Stéphane Sejourné, instó a “no trazar equivalencias” entre los miembros de Hamás y los altos cargos del Gobierno israelí.
Sudáfrica, con el TPI
Sin embargo, el presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, aplaudió la petición del fiscal general del Tribunal Penal Internacional (CPI). “Sudáfrica está comprometida con el Estado de derecho internacional, el respeto universal de los derechos humanos y la solución de todas las disputas internacionales mediante la negociación y no la guerra, y la autodeterminación de todos los pueblos, incluidos los palestinos”, afirmó Ramaphosa a través de un comunicado oficial.