El Comité de Investigación de Rusia ha elevado a 133 el número de fallecidos en el ataque del viernes contra la sala de conciertos Crocus City Hall en Moscú, según su último balance publicado en la mañana del sábado, conforme los servicios de Emergencia van extrayendo cuerpos sin vida de entre los escombros del recinto, incendiado por los atacantes.

La agencia investigadora, en otro comunicado previo también publicado en su cuenta de Telegram, achacó los fallecimientos a las heridas de bala provocadas por los responsables del ataque y a la asfixia por el incendio de la sala durante el atentado.

El comité ya había pronosticado que el número de fallecimientos aumentará en las próximas horas mientras que un nuevo balance del Ministerio de Salud de Rusia ha indicado que ahora mismo hay 80 hospitalizados por el atentado, entre ellos 13 personas en estado crítico y 25 en estado grave. Al menos cuarenta personas han tenido que ser operadas de urgencia a lo largo de esta pasada noche. Ocho heridos han recibido el alta en las últimas horas.

Los servicios de emergencia revisan el edificio

Mientras tanto, las fuerzas de seguridad seguirán a lo largo de este sábado, ya extintas las llamas, "con la inspección del recinto y la incautación de pruebas materiales" y el estudio de las grabaciones de las cámaras de circuito cerrado de televisión que captaron el tiroteo.

La agencia ha confirmado que los atacantes emplearon durante el atentado "un líquido inflamable para incendiar el local de la sala de conciertos" mientras disparaban a los espectadores con armas automáticas que "han sido descubiertas e incautadas por los investigadores". Las llamas acabaron provocando el desplome de parte del techo del recinto.

11 detenidos

El Servicio de Seguridad Federal de Rusia, el FSB, ha anunciado este sábado la detención de once personas presuntamente vinculadas al atentado -- reivindicado en principio por Estado Islámico --, entre ellas cuatro supuestos responsables directos del ataque.

Horror en la sala de conciertos

Los atacantes accedieron al edificio vestidos de camuflaje y armados con metralletas y lanzaron numerosas ráfagas de disparos contra civiles.

Además, tras el primer asalto se registró un virulento incendio que consumió cerca de un tercio del edificio.

Putin, informado

El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha asegurado que el presidente Vladimir Putin ha sido notificado de lo ocurrido apenas unos minutos después de conocerse la noticia del tiroteo, y que desde entonces recibe "constantemente información" actualizada sobre el avance de las investigaciones y las operaciones de seguridad.

La Dirección Principal de Investigación rusa ha abierto una causa penal por un posible ataque terrorista, un extremo compartido por la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Maria Zajarova, que también ha apuntado a las posibles motivaciones terroristas del suceso.

La Agencia Federal de Transporte Aéreo, por su parte, ha informado de que los cuatro principales aeropuertos de Moscú han reforzado sus medidas de seguridad con un control más exhaustivo de los grupos de entrada, así como en todo el perímetro de las instalaciones.

Estados Unidos había alertado del riesgo de ataque

Este suceso se produce apenas dos semanas después de que la Embajada estadounidense en Moscú advirtiera de un riesgo "inminente" de ataque terrorista contra grandes concentraciones de personas en la capital rusa, recomendando a sus ciudadanos evitar aglomeraciones.

De hecho, desde Washington se ha pronunciado el portavoz de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, quien ha trasladado su apoyo a las familias de las víctimas. Además, ha señalado que "no hay indicios" de que Ucrania haya podido estar involucrada en el tiroteo.

En este sentido, la portavoz de la diplomacia rusa ha recalcado que si las autoridades de Estados Unidos cuentan con información sobre el suceso, deberían compartirla inmediatamente con el Kremlin, y ha reprochado a Washington centrarse en defender la inocencia de otro país teniendo en cuenta la elevada cifra de muertos. 

Condena de la ONU

El secretario general de la ONU, António Guterres, y el Consejo de Seguridad de la organización condenaron este viernes el ataque terrorista. El Consejo de Seguridad condenó también ese "ataque terrorista atroz y cobarde" y sus miembros instaron a la comunidad internacional a "cooperar activamente con el Gobierno de la Federación Rusa" y otras autoridades para conseguir justicia.

Ninguna de las dos partes mencionó al Estado Islámico, si bien el máximo organismo de decisiones de la ONU señaló que sus miembros consideran "cualquier acto de terrorismo criminal e injustificable, independientemente de su motivación y de quién, cuándo y dónde se cometa".

Tanto Guterres como el Consejo enviaron condolencias a las familias de las víctimas y al pueblo ruso.

Primer ataque desde la guerra de Ucrania

El ataque es el primer atentado terrorista de gravedad ocurrido en este país desde el comienzo de la guerra en Ucrania hace más de dos años y el mayor perpetrado en la capital rusa en más de una década.

El Ministerio de Exteriores de Rusia ha llamado a la comunidad internacional a condenar el atentado y en las últimas horas se han sucedido las condenas de numerosos países.

EE.UU., que pertenece a los miembros permanentes del Consejo de Seguridad junto a Rusia, expresó previamente esta tarde sus condolencias a través del portavoz de la Casa Blanca, John Kirby.