Por estas latitudes el aire acondicionado no es tan necesario como en otras regiones más al sur. Sin embargo, hemos podido comprobar muchas veces el llamativo fresco que expulsan algunas tiendas, generalmente grandes cadenas con grandes presupuestos, a las que por lo visto no les importa el despilfarro ni energético ni económico. Es de suponer que contabilizará como gasto de marketing porque el aire frío en un ambiente caliente llama a entrar. Ahora prohíben tener las puertas abiertas si está puesto el aire, algo que es de sentido común, pero, por lo visto, se necesita una ley para que se cumpla. Últimamente, hay muchas normativas que se aprueban para poner sobre el papel cuestiones de sentido común pero, como dice el refrán, ese sentido es el menos común de los que existen. Las tertulias se dedican estos días a hablar sobre si quitarse la corbata ayuda a la climatización. No sé si en los Emiratos debatirán sobre si las amplias túnicas negras que tapan a las mujeres promueven el aire acondicionado y no creo que les importe. Pero en el asunto de la corbata vamos muy retrasados. Hace 17 años que el Gobierno de Japón, un país en el que las formas de vestimenta son más rígidas que entre nosotros, se quitó la corbata para cuidar el clima. Las fotos dicen que ya se la han vuelto a poner.