Después de haber ganado las tres últimas ediciones, parte como favorito en la final de este sábado en Azpeitia.

Eso parece. Por el trabajo que hice en la clasificatoria, creo que soy favorito, pero el trabajo de la final no tiene nada que ver con el de la eliminatoria y los rivales vendrán muy preparados. A ver si podemos lograr la txapela.

Podría lograr su cuarta txapela, superando a Xabier Zaldua (2018, 2019 y 2020) y a Joxe Mari Olasagasti (1983, 1984 y 1990).

Estamos pensando en eso desde el año pasado. Al final, son dos deportistas muy grandes, dos referentes, y tener la oportunidad de superarles ya es increíble. No lo tendremos fácil, pero vamos por el buen camino y lo intentaremos. 

¿Cómo se encuentra?

–La verdad es que me encuentro en la mejor forma física en los cinco años que me dedico a esto. Me noto muy bien, llego muy entero. He llevado la preparación muy bien. El año pasado me entrené demasiado y llegué cansado. Hemos aprendido año tras año. Mi entrenador, Pablo Cazalis, me decía que he sido su ratita de laboratorio y creo que llego en un punto muy bueno. Para mí Pablo es como un hermano, porque el trabajo que hacemos el uno con el otro es impresionante. Con mi tío Joxe Ramon –Iruretagoiena, Izeta II– este año he mejorado mucho con la piedra. El año pasado Xabat Olaizola nos sacó mucha ventaja con la piedra y hemos apretado mucho. Joxe Ramon me ha enseñado mucho en cuanto a la técnica, y he sufrido mucho este invierno. Hemos experimentado un montón, y él también ha acertado. También voy con otro entrenador de hacha. Antes andaba con Agite, pero me dijo que lo quería dejar, y ahora estoy con Joxe Miguel Peñagarikano, que también fue vencedor del Campeonato de Euskal Herria de primera división. He intentado mejorar los puntos débiles, y creo que todo ha ido bien. En la clasificatoria ya se vio que corté los troncos empleando un minuto menos que el año anterior. 

“Tener la oportunidad de lograr cuatro txapelas y superar a Zaldua y a Olasagasti es increíble. Son deportistas muy grandes”

Ha evolucionado mucho desde sus inicios. En la pasada edición, se impuso en dos de las cinco pruebas, con la aizkora (8:19) y en la carrera a pie (13:22). En cambio, en su primera participación, en 2021, fue el más rápido en las demás categorías –levantamiento de piedra, arrastre de piedra y acarreo de pesas–.

Desde hace dos años he dado un salto muy grande. He trabajado mucho con el hacha, he subido al campeonato de aizkolaris primera división… Creo que para hacer los tiempos que quería hacer tenía que mejorar con el hacha, porque tenía mucho margen. Tenía que dar ese salto. En ese aspecto, he mejorado un montón.

El récord histórico del pentatlón vasco está en manos de Joxe Mari Olasagasti desde 1990 (27:20). ¿Se plantea batirlo?

Eso es imposible para nosotros. Para mí, bajar de 30 minutos en la final ya sería un logro muy grande. Creo que nunca llegaré a bajar de eso. No voy a bajar de 29 minutos nunca, no puedo. Hay que ser realista. Los que competían antes eran muy buenos, y Olasagasti era increíble, un animal, y nosotros no llegamos a esas marcas, es imposible.

Sí se plantea bajar de los 30 minutos en la final...

Sí. Esa es mi idea. No me voy a retirar hasta bajar de los 30 minutos en la final, eso lo tengo claro. Si es este año, de lujo, y si no lo intentaremos dentro de dos años, o los años siguientes. Pero son palabras mayores. Es muy difícil bajar de 30 minutos, pero nunca hay que rendirse. Entrenamos para eso y lo voy a dar todo para intentar acercarme a ese tiempo. 

De momento, este año ya ha batido su propio récord en una eliminatoria (11:07).

La verdad es que no pensaba rebajar ese tiempo. En ningún momento me he entrenado con el trabajo de la eliminatoria, siempre me he entrenado con trabajos más largos, pensando en la final. Me encontré muy bien, empecé muy fuerte, aguanté el ritmo y lo mantuve hasta el final, y sorprendentemente rebajé la marca anterior en 40 segundos, que para mí era increíble. La verdad es que estoy muy contento. 

“El pentatlón vasco fue un producto estrella, pero se ha explotado demasiado. Lo hemos quemado nosotros por falta de respeto”

Volviendo a esta edición, Ioritz Gisasola logró el segundo mejor tiempo de la eliminatoria, pero Xabat Olaizola es el actual subcampeón. ¿Quien cree que será su principal rival?

Creo que mi principal rival será Xabat, porque nos sacará ventaja levantando la piedra, e imagino que después iré yo y luego Ioritz por detrás, intentando atraparle. Intentaré acercarme a él lo más rápido posible. Esa va a ser mi estrategia. Creo que Ioritz se acercará mucho cortando los troncos y corriendo, porque es un chaval que estará en 80 kilos. Yo estoy en 93 y Xabat estará en 100, y para correr nos pesa el cuerpo un poco más. 

El año pasado, Xabat Olaizola le aventajó en 36 segundos en la primera prueba, el levantamiento de piedra, pero acabó superándolo en dos minutos y diez segundos. El zarauztarra también fue el más rápido con las pesas.

Él es levantador de piedras. Ahora yo me estoy acercando bastante a serlo, pero aún así también nos sacará una ventaja bastante seria, y tendremos que ir remontando por detrás poco a poco. 

¿Cuál es la modalidad que más le preocupa?

Ahora mismo no es que tenga una prueba que se me dé mal o a la que le tenga miedo. Hace dos o tres años, cortar tres kanaerdikos me daba mucho respeto. Ahora, creo que tengo controlado más o menos todos los trabajos. Lo que pasa es que si salimos demasiado rápido en el levantamiento piedra para alcanzar a Xabat, luego podemos pagarlo. 

Los torneos de pentatlón vasco se han reducido en los últimos tiempos. ¿Cómo ve la salud de esta disciplina?

Creo que el pentatlón vasco fue un producto estrella que trajeron hace unos años, pero que se ha explotado demasiado. Me da mucha pena. Campeonatos de primera división, de segunda división, de parejas, dos campeonatos de chicas… Yo creo que ha sido demasiado, y lo hemos reventado nosotros. Y lo vamos a pagar pentatletas como yo u otros que nos dedicamos a esto. Al final la gente ha competido en el pentatlón como si fuera una apuesta entre amigos, o por salir a participar, y yo no estoy de acuerdo con eso. Yo creo que cuando se sale a la plaza hay que estar preparado y dar el callo, y creo que los deportistas le hemos perdido el respeto al pentatlón. Es un tema bastante complicado. El pentatlón vasco lo hemos quemado nosotros por falta de respeto. 

Después de la final del pentatlón vasco competirá en la eliminatoria del campeonato de Euskal Herria de aizkolaris de primera categoría. 

Intentaré jugar la final de primera división, pero lo veo un poco difícil. Es dentro de dos semanas y hemos entrenado bastante para eso. Competir contra esos aizkolaris te hace ilusión, pero hay gente que se dedica solo a esto y es muy difícil jugar la final.