as redes sociales han traído muchos cambios. También al mundo de la moda. Hoy en día no hace falta un desfile o un escaparate para dar a conocer las creaciones. Las redes sociales pueden ser el mejor escaparate. El urretxuarra Egoitz Ruiz se está haciendo conocido entre los jóvenes de su edad, de la mano de su perfil de Instagram y con la ayuda de sus amigas que hacen de modelos.

Ruiz tiene solo 20 años. Ha estudiado el grado superior de Patronaje y Moda en Donostia y espera hacer las prácticas en alguna empresa de Madrid. "Mi madre hizo un curso de joven, mis dos abuelas saben coser... Siempre me ha gustado dibujar vestidos y trajes y me he animado a aprender a cortar y coser".

No sabía ni coser un botón, pero ya cose sus propios modelos. "Hace unos meses empecé a hacer mis propias camisetas y viseras. A la gente le han gustado mis diseños y me han pedido más cosas: bolsas, tops...".

Se vale de Instagram para dar a conocer sus diseños. "En clase nos enseñaron cómo crear nuestra marca y nuestra empresa y tuvimos que crear una marca. Algunos lo tomaron como un proyecto de clase, pero yo decidí ponerlo en marcha: creé un logotipo, abrí una cuenta en Instagram, empecé a coser fuera de clase... Cuando la gente empezó a pedirme que hiciera más cosas, me di cuenta de que estaba cogiendo cuerpo".

Utiliza ropa usada y telas recicladas. "No me gusta echar nada a la basura. El traje que se hace con una cortina vieja quizá no sirve para salir a la calle, pero sí para desarrollar un diseño y mostrarlo. Los amigos me dan ropa y telas viejas para que trabaje".

Su marca es Ego Kouture y el logo es un ángel. "Siempre me han gustado los ángeles y los diablos y un ángel es llamativo como logotipo".

En cuanto a sus diseños, sus referentes son los artistas globales y la moda de comienzos de siglo. "Me gustan los diseños llamativos". Le gustaría llegar a un público más variado. "Hoy en día, mi público está formado por chicas de 20 a 25 años. Por ello, diseño para ellas. Considero que la ropa no tiene género, pero hago lo que me piden las chicas. Me gustaría que los chicos también me pidieran ropa y me dijeran lo que quieren".