- El Ayuntamiento de Amasa-Villabona se muestra "preocupado" con la evolución que está teniendo la recogida de residuos. En los próximos meses se incidirá en la sensibilización y si los problemas detectados no se solucionan, el ayuntamiento anuncia que "estará obligado a subir la tasa de recogida de basura que paga la ciudadanía, ya que los gastos municipales aumentan considerablemente cuando los datos de la recogida empeoran".

Reconocen que en 2015 se logró un consenso político "muy importante" en torno al sistema de recogida. Sin embargo, han detectado que cada vez se depositan más bolsas fuera de los contenedores. Asimismo, en el orgánico se vierten grandes cantidades de residuos mal clasificados. En cuanto a los residuos voluminosos, se está extendiendo la costumbre de dejarlos cualquier día en la calle. También se ha detectado que varios contenedores de zonas rurales se han convertido en vertederos improvisados. Como consecuencia de todo ello, el porcentaje de residuos bien clasificados va descendiendo.

Debido a la crisis de la COVID-19, el ayuntamiento decidió abrir los contenedores y, aunque en otras localidades se han vuelto a cerrar, en Amasa-Villabona han decidido mantenerlos abiertos. "Esta decisión no será irreversible; se valorará en función del porcentaje de recogida selectiva, de la calidad del orgánico y de la evolución de lo que se vierte al suelo", matizan. El Ayuntamiento analizará los datos y ha establecido unas líneas rojas: no se permitirá que la recogida selectiva baje del 70%, que descienda la calidad del orgánico y que no se reduzca la basura que se tira al suelo. "Dependerá de todos y todas que vuelvan a cerrar los contenedores o no", añaden.

De esta forma, se realizará un estrecho seguimiento de las basuras que se arrojen al suelo o a lugares que no corresponden. También se han realizado estudios sobre los vertederos improvisados en zonas rurales y se ha puesto en marcha un nuevo sistema de control en el parque Komizar.

Desde el consistorio sostienen que "a pesar de que el comportamiento de una minoría deja imágenes deplorables, la mayoría de la población tiene una actitud positiva hacia el medio ambiente y la recogida selectiva".

Para contrarrestar la tendencia negativa se incidirá en la sensibilización. Se informará sobre la gestión de los residuos a los que vengan a vivir a Amasa-Villabona y se creará un cartel informativo que se colocará en todos los portales. Además, se publicarán mensualmente los datos de la recogida.

Si los problemas no se solucionan, el Ayuntamiento "estará obligado a subir la tasa de recogida de basura que paga la ciudadanía"