- La presión fiscal subirá en 2022 un 1,5% para los donostiarras, algo más que el 1,1% que aumentó el pasado año. Esta es, al menos, la propuesta aprobada por el Gobierno municipal PNV-PSE en su Junta de Gobierno de ayer. La tabla de tasas e impuestos inicia ahora un proceso hasta su aprobación en el Pleno, aunque la mayoría absoluta del Ejecutivo local augura pocos cambios en la directriz general.

Así, aunque puedan incorporarse cambios propuestos por los grupos de la oposición, la intención del Gobierno de Eneko Goia es que el incremento medio de impuestos municipales y tasas sea del 1,5%. La cifra tiene en cuenta la previsión de aumento del IPC para 2022, que se calcula en 1,8%, menos la reducción de este índice el pasado año, que bajó un 0,3%, según explicó Goia. El mandatario destacó que aunque la mayoría de las tasas se mantendrán sin subidas, otras sufrirán cambios al alza. Por ejemplo, la de saneamiento aumentará un 3% por el nuevo Canon del Agua que cobrará la Agencia Vasca del Agua Ura, del 5%, que repercutirá en los usuarios. La tasa de recogida de residuos, por su parte, se encarecerá un 1,5% para tratar de reducir el déficit histórico que arrastra. Los establecimientos hosteleros y sociedades gastronómicas tributarán como locales vacíos en los dos primeros trimestres de este año y las sociedades, además, en el último de 2020.

El precio de la OTA será otro de los conceptos que aumentarán un 1,5%, al igual que la grúa municipal. En este caso, cuando la retirada del vehículo sea necesaria por el acotamiento de una zona por obras o eventos, no será el dueño del vehículo quien deberá pagar la grúa sino el organizador o responsable de acto que requiera retirar los coches, según explicó el alcalde. En estos casos, la tarifa de la grúa será de 50 euros.

También se notará un aumento de precios en los servicios playeros, que llevan congelados desde 2013 y 2014. El uso de las cabinas de las playas se encarecerá y, por ejemplo, el uso de duchas pasará de 1,10 a 1,60 euros, un 66% más, y el de taquilla y ducha, de 1,50 a 2,50, lo que supone un 45% más. Los abonos de temporada (este año no hay a causa de la pandemia, pero costaban 64,55 euros) pasarán a tener un precio de 75 euros. Los de 20 usos crecen de 20,40 a 28 y los de 15, de 11,27 a 15 euros.

Por otra parte, las tasas por ocupación de vía pública a causa de vallados y andamios también aumentarán un 3%. En el caso de los impuestos, mientras el de Actividades Económicas (IAE) y el de Construcciones (ICIO) se mantendrán igual, el de Bienes Inmuebles (IBI) crecerá un 1,5%, al igual que el del Plusvalías para los tramos cortos de compraventa y el de Vehículos, que lo harán en la misma proporción.

Tasa de saneamiento. Subirá un 3% ya que en el precio repercutirá el nuevo Canon del Agua, que cobrará el Gobierno Vasco.

Basuras. La recogida de residuos será un 1,5% más cara.

OTA. Su precio aumentará un 1,5%

Vallas y andamios. Un 3% más.

Cabinas de la playa. Las duchas costarán 1,60 euros (66% más) y la ducha con taquilla, 2,50 (45% más).