El alcalde de Donostia, Eneko Goia, ha expresado hoy su "decepción" por las aglomeraciones de personas en distintos lugares de la ciudad registradas la madrugada del pasado domingo y ha advertido de que la Policía Municipal tiene "evidentes limitaciones" para poder actuar contra ellas. Goia ha hecho estas declaraciones, a preguntas de los periodistas, durante la visita que ha hecho este lunes a las nuevas instalaciones del Archivo Municipal que el Ayuntamiento ha abierto recientemente en la zona de Atotxa.
Las imágenes publicadas y difundidas en las redes sociales de numerosos grupos de jóvenes festejando el fin del estado de alarma en la Parte Vieja, el muelle u otros lugares céntricos de la capital guipuzcoana, le han causado "decepción", ha dicho el regidor donostiarra, quien ha considerado que, aunque "todos tengamos ganas" de que la pandemia termine, "desgraciadamente, todavía no lo ha hecho". Ha asegurado que a lo largo de la madrugada del domingo agentes de la Guardia Municipal se desplazaron a diversos lugares e "indicaron" a los congregados que "no se podía estar allí", si bien ha enmarcado estas intervenciones en "su actuación habitual". Goia ha advertido además de que, posiblemente, hubo más concentraciones de personas en la calle en otros puntos de San Sebastián pero, "cuando hay gran cantidad de gente que decide incumplir, es difícil poder atacar a todas ellas" a la vez, pues "los recursos" de la Policía local "no son ilimitados".
"La Guardia Municipal se debe a la legalidad vigente y eso es así, nos guste o no", ha subrayado el alcalde, quien ha insistido en que, tras decaer el estado de alarma y con él el toque de queda y las restricciones a las agrupaciones de personas en la vía publica y a la movilidad, "las limitaciones" para poder intervenir "son evidentes".
Se puede "reforzar" la vigilancia en las calles pero, "si el marco legal, no te permite hacer determinadas cosas...pues es de poca utilidad", ha zanjado.
El primer edil donostiarra ha opinado que, por eso, ahora es "más importante que nunca" que cada cual adopte una actitud "responsable" y ha hecho un nuevo llamamiento a "seguir actuando con responsabilidad" para que la situación sanitaria "no vuelva a empeorar".
"Más allá de lo que son las normas que obligan" debe haber "una obligación moral" de "actuar de forma responsable, ahora más que nunca" porque "nos estamos jugando la salud", ha zanjado.
