El polideportivo de Zuhaizti de Donostia cerrará por obras durante cinco meses, entre el 1 de mayo y el 1 de octubre, según anunció este viernes el concejal de Deportes, Martin Ibabe, que reconoció que la situación acarreará molestias a los usuarios, que tendrán que trasladarse a otros centros deportivos. “Soy consciente de las afecciones que conlleva pero, tras estudiar el caso, creemos que ahora es mejor momento para hacerlo que a partir de octubre”, declaró.

Aunque, en un principio, Donostia Kirola pensó que podría llevar a cabo las obras cerrando solo un mes, y el resto del tiempo compaginando los trabajos con la actividad deportiva, “un análisis posterior más en detalle del contenido de las obras ha aconsejado cerrar durante los cinco meses que durarán estos trabajos, para garantizar la seguridad y el confort de las personas usuarias”, dijo Ibabe.

El repentino anuncio, sin embargo, provocó el malestar de numerosos usuarios, que se quejaron de la situación y enviaron escritos de protesta tanto a Donostia Kirola como la empresa gestora, BPXsport, además de manifestar su enfado en las redes sociales.

Las obras que arrancarán en mayo estaban incluidas en el concurso público convocado por el Ayuntamiento de Donostia para gestionar esta instalación. A ellas se unen otras reformas propuestas por la propia concesionaria en su oferta. En concreto, se invertirán 2,5 millones de euros en rehabilitar toda la instalación, incluida la cubierta, muy deteriorada, por donde se cuelan las goteras. Además, se renovarán las instalaciones de saneamiento, ventilación, electricidad, telecomunicaciones, agua y climatización.

La seguridad, la salubridad y el ahorro energético a través del aislamiento térmico de cubiertas y fachadas, con una climatización más eficaz, son objetivos de la obra, que pretende conseguir un edificio que consuma menos energía y mejore su confort interior para los usuarios.

Algunos espacios deportivos también cambiarán. Por ejemplo, el gimnasio fitness pasará a tener una mayor superficie y zonas diferenciadas para el trabajo de musculación, cardiovascular o de entrenamiento funcional. Además, se instalarán máquinas de última generación.

Nuevas salas de actividades, una zona wellness (sauna, baño turco), una ludoteca, un servicio de fisioterapia y mejoras en los accesos, la recepción y las oficinas son otros de los cambios previstos.

Los abonados y cursillistas, que han pagado ya distintas cantidades económicas, tienen hasta el 30 de abril para elegir la forma de recuperar el dinero. Pueden elegir entre hacer uso del nuevo centro deportivo de Riberas de Loiola, que gestiona la misma empresa BPXport, beneficiarse de una bonificación de la cuota cuando reabra Zuhaizti o recuperar el dinero proporcional al tiempo en el que no podrán usar su polideportivo habitual.

Donostia Kirola anunció que reforzará las actividades de verano en el resto de polideportivos para dar un mejor servicio a los huérfanos de Zuhaizti.