- El plan especial que comenzó a tramitar el Ayuntamiento de Donostia para permitir la construcción de un hotel de 100 habitaciones en una parcela libre situada detrás de la residencia San Ignacio-Hermano Gárate de Ulia ha quedado descartado por el momento, como reclamó en repetidas ocasiones la asociación de vecinos desde que se presentó la propuesta.

Así se lo hizo saber la concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus, al Ararteko el pasado mes de julio, después de que la institución le reclamara que aportase documentación para conocer los pormenores de una tramitación que, según la queja de la entidad vecinal, era irregular y no debía ser aprobada.

En su misiva a la institución presidida por Manu Lezertua, la concejala de Urbanismo donostiarra explica que "a raíz de las alegaciones presentadas" por la asociación de vecinos, "ha surgido un debate sobre la mejor ordenación para ese ámbito, un debate que se está demorando más de lo deseado". No obstante, agrega en su carta que, "de cara a los alegantes y sus pretensiones, hay que tener presente que, según el artículo 95.4 de la ley de suelo y urbanismo de 2006, el promotor puede entender desestimada la aprobación del plan especial". El citado artículo señala que la aprobación provisional o definitiva de este tipo de planes urbanísticos no puede exceder seis meses desde la inicial. Teniendo en cuenta que la Junta de Gobierno de Donostia dio su visto bueno inicial a la propuesta en mayo de 2018, ésta dejó de estar en vigor a finales de año ya que no prosiguió su tramitación.

"Confiamos en que a la mayor brevedad el Ayuntamiento tome una decisión definitiva sobre este expediente y a ello se compromete con la institución del Ararteko", añade la concejala. Así pues, queda claro que la propuesta presentada hace más de dos años ha quedado abortada, aunque se desconoce si el espacio será objeto de otro plan especial con la misma finalidad u otra diferente.

La asociación de vecinos de Ulia mostró su satisfacción por la respuesta del Ayuntamiento y reiteró que el plan especial que había presentado la empresa propietaria del complejo San Ignacio-Hermano Gárate para ubicar un hotel en la parcela trasera no debe ser aprobada por ser resultado de "una trampa" y una operación de "fontanería urbanística", además de suponer un gran impacto, de once metros de altura, sobre la ladera verde de esta zona de Ulia. Según el relato de la asociación, la parcela trasera de este centro de mayores fue adquirida en 1978 como espacio libre, con el fin de anexionarla al edificio residencial y compensar así el aumento de edificabilidad que se había producido con su construcción, que provocaba un déficit de espacios verdes en la parcela, según las normativas.

cambio de objetivo

Hace doce años, los propietarios del terreno propusieron construir 43 apartamentos para mayores, pero la parcela carecía de edificabilidad. Esa posibilidad se le permitió en la modificación del Plan General, ya que en ese momento el Consistorio consideró que existía necesidad de dotaciones para personas mayores. Este tipo de alojamientos encaja en los terrenos de tipo terciario, como se calificó la parcela, pero también los hoteles. Por ello, la asociación de vecinos consideró "una tergiversación" que el plan especial presentado hace dos años cambiase los apartamentos por un hotel.

Solo en lo que llevamos de año se han abierto en Donostia ocho hoteles, con cerca de 400 habitaciones. Con estas incorporaciones, la capital guipuzcoana alcanza el medio centenar de hoteles. Además, hay alrededor de una decena más en fase de tramitación, proyecto y construcción.

A causa de la pandemia, algún veterano establecimiento ha optado por cerrar sus puertas de modo temporal ante la falta de reservas.