- El acceso de personas a la rampa de Kai-Arriba, en el muelle donostiarra, ha sido limitado por el Gobierno Vasco, que tiene la competencia en el puerto, con el objetivo de evitar las aglomeraciones de personas que se han producido en las últimas jornadas, así como para garantizar la seguridad de las actividades náuticas. La rampa por la que se bajan embarcaciones al agua también es usada como pequeña playa por parte de algunos, pese a que el baño en el puerto está prohibido.

La dirección de Puertos y Asuntos Marítimos del Gobierno Vasco dio ayer a conocer su decisión de limitar el acceso a la rampa y reservarla para el uso de los servicios portuarios, emergencia y usuarios que deseen acceder a la lámina de agua con algún tipo de embarcación.

La medida se ha adoptado atendiendo a las recomendaciones sanitarias de evitar aglomeraciones de personas para prevenir contagios del COVID-19, así como para velar por la seguridad de las actividades náuticas, según informó el Ejecutivo autonómico.

Durante los últimos días se han registrado aglomeraciones de personas que, bien sentadas o tumbadas al sol, han ocupado por completo la rampa del puerto de Donostia sin respetar distancias sociales y taponando el paso.

Esta situación ha impedido el normal acceso al agua de piraguas, embarcaciones ligeras de vela, bateles y traineras, generando maniobras peligrosas y enfrentamientos entre las personas que ocupan los muelles y las que deseaban acceder al agua con sus embarcaciones.

El Gobierno Vasco hizo un llamamiento a todas las personas vecinas y usuarias del puerto, para que respeten las restricciones de la rampa y que las actividades náutico-recreativas, cursillos y demás usos portuarios puedan desarrollarse con seguridad.