- Dos años de legislatura en los que, según destaca el grupo municipal del PNV de Bergara, han ejercido una labor de oposición "constructiva", haciendo aportaciones que "a menudo no han sido tenidas en cuenta por EH Bildu, y en las que han dado un sí por respuesta no han hecho ningún esfuerzo por sacar adelante los compromisos adquiridos". Los jeltzales han aprovechado el ecuador de la legislatura para hacer un balance "positivo" de sus iniciativas, a la vez que crítico con el Gobierno municipal al que acusa de "falta de gestión" y de no tener "ninguna voluntad de colaboración". "Las comisiones se utilizan para comunicar las decisiones ya adoptadas, sin dar margen a aportaciones que mejoren los proyectos", denunció la portavoz del PNV, Maite Agirre, en la comparecencia desarrollada esta semana.
Agirre defendió "la colaboración" como clave para "afrontar los retos a los que nos enfrentamos", muchos de ellos consecuencia de la pandemia. Sin embargo, reprochó a EH Bildu su "actitud" porque, en palabras de la edil jeltzale, "no ha sido las más adecuada". "De entre las aportaciones que hemos hecho que han tomado en consideración, en ningún caso se han cumplido después de dos años", aseguró Agirre.
A pesar de "estos obstáculos", el PNV valoró "positivamente" el trabajo que están realizando con el objetivo, tal y como insistió, de "garantizar la calidad de vida y el bienestar de las y los bergareses".
La portavoz jeltzale repasó las propuestas que han presentado en este tiempo de cara a las ordenanzas fiscales y al presupuesto municipal, además de medidas para hacer frente al covid-19, entre ellas subvenciones directas a la hostelería, y planes como la creación de un servicio de atención diurna para personas mayores con dependencia leve en el antiguo local del centro de día, en el edificio de Boni Laskurain. Recalcó, además, las apuestas del PNV por la puesta en marcha de un espacio para funerales civiles, la ejecución este año de la primera fase de la reurbanización Zubieta-Masterreka, el inicio del proyecto del parking subterráneo en el patio del Seminario, la estabilización provisional de la pendiente de Bolu y la redacción del plan de reforma del barrio de Martoko. En cuanto a la propuesta para abordar de forma participativa el proyecto que alojará en el palacio Arrizuriaga a grupos culturales, Agirre afirmó que "aún no han recibido una respuesta".
Por último, el PNV apeló a la convivencia en alusión a las pintadas y pancartas que han aparecido en los últimos meses. "Manifestamos nuestro más absoluto rechazo y pedimos de nuevo al Gobierno municipal que las retire. En democracia, para conseguir la convivencia y la normalidad política, no son aceptables este tipo de mensajes", sentenció Agirre.
