pesar de que pasen los días, los meses y los años, el amor verdadero no entiende de espacio ni de tiempo. Cinco décadas dan para mucho. Infinidad de recuerdos y vivencias, numerosas enseñanzas que aporta la madurez de la edad y los golpes de la vida. Medio siglo en pareja. Y, sobre todo, en familia. Motivo más que suficiente para inyectar una buena dosis de alegría en este complicado 2020.

Mari Karmen Gutierrez y Pedro Etxebarria contrajeron matrimonio el 7 de diciembre de 1970 en Bilbao y, a partir de ahí, empezaron a tejer su historia. Al poco de sellar su amor se trasladaron a vivir a Aretxabaleta, donde han formado una bonita familia que se ha ido ampliándose. Dos hijos, una hija y ocho nietos y nietas.

El de Mari Karmen y Pedro es un ejemplo de vida en común. Pero no es el único. Como ellos otros matrimonios pueden presumir de alcanzar en este 2020 la cifra de 50 años juntos. Unas bodas de oro que no van pasar por alto. A pesar de las limitaciones que impone la pandemia quieren organizar un encuentro en Aretxabaleta. Ya lo hicieron en 1995. Cuando cumplieron las bodas de plata. Entonces se reunieron una decena de matrimonios y la experiencia les dejó un buen sabor de boca. "Lo celebramos con una misa, una buena cena€ La situación actual nos presenta dificultades, pero por lo menos nos gustaría llevar a cabo la misa", explica Pedro. "¡Ya tenemos bastante con la que está cayendo! Este es un motivo de alegría", añade Mari Karmen.

Hacen el llamamiento como miembros de la parroquia. Para el 4 de noviembre convocan a los matrimonios (también viudas o viudos) que este año cumplan cinco décadas de casados a la reunión que acogerá la antigua capilla del convento de Santa Rita (18.15 horas), donde se guardarán las medidas de seguridad. El objetivo es ponerse "de acuerdo" en cómo celebrar el aniversario (la misa, sobre si se hará alguna cosa más...).

Son testigos de los frutos del amor, del diálogo€ Sin rupturas. ¿Cuál es la receta? "En 50 años pasan muchas cosas. Alegrías y momentos duros. Hay que saber perdonar y pedir perdón, apoyarse el uno en el otro€ 50 años es una vida", sentencian.