El grupo municipal del PNV de Oñati ha exigido al Gobierno de EH Bildu la adopción de “medidas inmediatas” ante, según insiste, “el aumento significativo de la inseguridad en el municipio durante las últimas semanas”. En palabras de la formación jeltzale, los robos, las tentativas y otras situaciones sospechosas han dejado de ser “rumores aislados” para convertirse en “experiencias que cada vez más vecinos y vecinas viven en primera persona”. Añade, además, que la presencia de vehículos desconocidos en distintas calles, los comportamientos inusuales a diversas horas y las “numerosas llamadas” de alerta a la Policía reflejan una realidad que genera “preocupación y miedo entre la ciudadanía”.
Ante este escenario, el PNV señala que la respuesta del Consistorio “no está a la altura”. En una nota, incide en que “la obligación de garantizar un entorno seguro recae en el Gobierno municipal”, y asegura que “la falta de reacción y de medidas claras está creando entre la ciudadanía una sensación creciente de desprotección”.
"Postura ambigua"
La formación jeltzale sostiene, a su vez, que el origen del problema es “político”. A su juicio, la postura “ambigua, cuando no abiertamente contraria” de EH Bildu hacia la Ertzaintza ha derivado en “la inexistencia de un modelo policial definido” en los municipios donde gobierna la coalición soberanista. Una actitud que para el PNV oñatiarra se manifiesta “tanto en mensajes públicos que no contribuyen a la convivencia, como en decisiones que no se adoptan, lo que dificulta la coordinación entre instituciones que deberían colaborar estrechamente”.
Los y las ediles jeltzales consideran que “la falta de una posición definida” por parte del Gobierno municipal en materia de seguridad se traduce “de forma directa en una menor protección para la ciudadanía”.
Mayor presencia policial
El PNV denuncia, igualmente, “una falta de información y transparencia por parte del Ayuntamiento”. Según relata, las dudas trasladadas por los vecinos y vecinas “no están obteniendo respuesta, y las demandas ciudadanas –como una mayor presencia policial, mejor coordinación institucional y una comunica precisa– continúan sin ser atendidas”. Los jeltzales subrayan, asimismo, que esta situación resulta “aún más grave si se tiene en cuenta que las cámaras de vigilancia no están operativas y que durante las noches no hay servicio de Policía Municipal”.
“No se están pidiendo medidas extraordinarias, sino garantías básicas para poder vivir con seguridad y tranquilidad”, defiende el PNV, y advierte a EH Bildu de que, aunque siga hablando de un “modelo propio”, no puede mantener la actual ausencia de decisiones, “que está provocando descoordinación, desconfianza e inseguridad creciente entre la población”.
Correcto funcionamiento de las cámaras de vigilancia
Por ello, la formación jeltzale insta al Gobierno municipal a actuar “con urgencia, adoptar medidas claras y restablecer una coordinación eficaz con la Ertzaintza, la Policía Local y el resto de cuerpos de seguridad”. Reclama, al mismo tiempo, que se garantice el correcto funcionamiento de los sistemas de vigilancia y que se recupere la presencia de la Udaltzaingoa en aquellos horarios en los que actualmente no existe.