Uno de los bares más emblemáticos que ha existido en Urretxu es, sin duda, el bar Isabel. Se puede decir que es un bar de película, tanto en el sentido figurado como en el literal: su historia da para una película y acogió el rodaje de una película. Han pasado ya casi 33 años desde que se cerró, a causa de un incendio, pero los urretxuarras y zumarragarras no lo olvidan.

El bar lo abrió Isabel Agirre. Después lo tuvo un matrimonio de Legazpi. En 1958 lo cogieron Jose Miguel Ormazabal y Gregoria Otaegi. En 1972 lo cogieron Joxe Salegi y Maria Amutxastegi. En 1972, ambos dejaron su caserío del barrio San Miguel de Elgoibar y vinieron a Urretxu con seis de sus siete hijos. Los Salegi-Amutxastegi trabajaban en el bar y vivían encima.

El bar estaba ubicado en el barrio de las estaciones (Zumarraga tenía por entonces tres estaciones de ferrocarril). Debido a que estaba muy buen ubicado y los Salegi-Amutxastegi trabajaban mucho y bien, por el Isabel pasaba todo tipo de gente: usuarios del ferrocarril, trabajadores de las por entonces boyantes fábricas de Urretxu y Zumarraga, clientes de la discoteca Golden…

María se encargaba de la cocina (daban pintxos, cazuelitas, comidas y cenas) y de la barra se encargaban Joxe y algunos de sus hijos. Joxe era un gran aficionado a los bueyes y al arrastre de piedra y por las tardes se dedicaba a entrenar a sus animales. De hecho, el símbolo del Isabel era la cabeza de un buey disecado. Estaba colgada junto a la puerta de entrada y presidía el local.

La primera historia de película del Isabel está relacionada con esa cabeza de buey. El buey se llamaba Gorri y fue el mejor que tuvo Salegi. Ganó nueve de cada diez pruebas que disputó. Así, cuando murió el buey, Salegi decidió disecar su cabeza y colgarla en el bar. Y cuando Salegi falleció, le enterraron con uno de los cuernos del buey.

El Isabel, además de protagonizar historias de película, fue escenario de una película: Hamaseigarrenean, aidanez (Anjel Lertxundi, 1985). Fina Salegi, hija de Joxe y de María, trabajó en dicha película y propuso rodar en el Isabel las secuencias que transcurrían en un bar: una partida de cartas, la conversación entre el protagonista principal y la camarera, la tragedia final…

Hamaseigarrenean, aidanez es una de las cuatro películas en euskera de los años 80 que se están rehabilitando en los laboratorios L’Immagine Ritrovata de Bolonia. Las otras tres son Ehun metro (Alfonso Ungría, 1985), Zergatik panpox (Xabier Elorriaga, 1985) y Oraingoz izen gabe (José Julián Bakedano, 1986). 

Hamaseigarrenean, aidanez, Zergatik panpox y Ehun metro formaron parte del primer proyecto del Gobierno Vasco para promocionar el cine en euskera. Fina Salegi trabajó en las tres películas, en labores de producción.

Sección Klasikoak

Las cuatro películas que están siendo rehabilitadas se proyectarán en septiembre en el Festival de Cine de Donostia, en la sección Klasikoak. Todos los que acudan a las proyección tendrán ocasión de ver cómo era el bar Isabel. 

Un bar de película, que tuvo un final de película. En septiembre de 1992, en el día grande de las fiestas de Urretxu, los vecinos salieron a la calle a ver el desfile de carrozas. La cocina del bar Isabel cogió fuego y rápidamente se propagó por todo el edificio, pues su estructura era de madera. En aquel mismo momento las carrozas estaban pasando por delante de la casa y los urretxuarras salvaron a varios vecinos que habían quedado atrapados en sus balcones, con la ayuda de un andamio y varias escaleras.

Afortunadamente, no hubo que lamentar daños personales. Pero el edificio tuvo que ser derribado. Gracias al trabajo realizado por Fina Salegi y sus compañeros, todo el mundo puede ver cómo era el bar Isabel. Y gracias a la restauración financiada por el Gobierno Vasco a través de la Filmoteca Vasca y EITB, se podrá volver a ver en la gran pantalla.