Xabier Iturralde: "La sensación de meter la anilla en el cuerno de la vaca es algo adictivo"Iker Azurmendi
Xabier Iturralde (Azpeitia, 2000) tiene este domingo una cita del campeonato de anillas en los sanfermines de Iruñea donde, junto a su compañero Javier Soler, intentará ser la pareja que más anillas meta en los cuernos de la vaca, y así llevarse la victoria. Vienen, además, de un estreno por todo lo alto con victoria en Teruel.
Este domingo disputa el concurso de anillas de San Fermín. ¿Qué espera?
Será un concurso muy fuerte, con una ganadería top, la de Eulogio Mateo. Estoy muy expectante para ver como estamos, como respondemos, tras haber sufrido una lesión. Las ganas son las mismas de siempre, pero estamos expectantes. No sabemos con exactitud cómo estaremos físicamente, y el resto de las parejas están muy fuertes. Todavía estamos en periodo de adaptación, pero vamos a darlo todo.
¿Cómo compagina este 'hobby' con su trabajo?
La verdad es que la vaca y el trabajo no se llevan muy bien. De todas formas, estoy haciendo una tesis doctoral, y también trabajo como docente e investigo en Mondragon Unibertsitatea, en la Facultad de Educación, donde me respetan y me tratan muy bien. Pero los recortes son unas actuaciones que conllevan peligro. Ponerse delante de una vaca y exponerte, compaginándolo con el trabajo, lo llevo con mucho nerviosismo. De todas formas, nunca se sabe. Tengo compañeros que se les ha quedado la rodilla clavada haciendo escalada y han acabado con la pierna escayolada. De momento no he tenido ninguna baja. Aun así, lo compagino muy bien. Realizo mi jornada laboral, en mi tiempo libre hago deporte a modo de entrenamiento, y las competiciones las tengo los fines de semana.
Ander Lizarralde ha sido su pareja hasta la pasada temporada ¿Por qué cambió?
Comencé mi andadura de anillas con Ander, con quien aprendí la gran mayoría de lo que sé ahora, fue todo un referente para mí. Sin embargo, al final de mi segunda temporada me lesioné, mee costó casi toda una temporada recuperarme y, aunque a mi regreso ganamos el campeonato de España en Zaragoza, Ander decidió dejarme optó por Roberto Constanza. Me quedé sin pareja, y tuve que buscarme la vida. Fue entonces cuando conocí al valenciano Javier Soler "Magín", hijo del mítico recortador Juan Ramón Soler "Magín". La pasada temporada la hice con él y conseguimos ganar siete concursos, solo por detrás de Ander y Roberto, que se llevaron ocho. En nuestra primera temporada juntos terminamos en segunda posición, una campaña muy buena para ser nuestra primera como pareja. Ahora vamos a por esta temporada, que será mi quinta.
"El concurso de este domingo en San Fermín será muy fuerte, con una ganadería top como la de Eulogio Mateo"
¿Cómo se entiende con su nuevo compañero en la plaza?
El entendimiento con tu compañero lo es todo. Necesitas tener al lado a una persona que sepas que va a responder. La química es muy importante. A partir de que eliges a una persona, vas con ella a muerte. Vas a todos los concursos con él, intentas entrenar con él, etc. En mi caso, conocí a Javier el año pasado, es bastante más joven que yo, pero nos llevamos muy bien. Tenemos una mentalidad a la hora de entender la vaca muy similar, lo cual es muy importante. Además, hemos trabajado mucho juntos, y desde que hemos empezado hemos ido reforzando nuestra amistad.
El recortador de Azpeitia, Xabier Iturralde, en frente de la plaza de toros de Azpeitia
¿Cómo entrena para ser recortador?
En mi día a día entreno la parte física, y también la técnica, sin dejar de lado la parte mental. En cuanto a la parte física, hago ejercicios de fuerza en un centro, acompañado de un entrenamiento por mi cuenta que consiste en salir a correr, bicicleta, etc. Respecto a la parte técnica, intentamos recrear una situación lo más real posible a una competición de anillas. Por un lado, hacemos una capea con vacas en la arena. En el caso de que no se pueda, lo simulamos con el grupo de compañeros que tenemos en el pueblo. Tenemos cuernos y pitones conseguidos de ganaderos, y montamos una vaca de la mejor manera posible. Ese entrenamiento es muy bueno porque podemos simular distintos tipos de vacas, embestidas, pitones... No es real, pero se asemeja bastante.
¿Y qué parte es más importante, la física o la mental?
Se suele decir que es más importante la parte mental, aunque yo creo que van acompañados. Si no estás bien físicamente, es difícil estar bien mentalmente. Te enfrentas a una vaca muy fuerte, que está entrenada y te lo va a poner muy difícil. Te tienes que exponer tres minutos a muerte. Diría que las dos partes son importantes, tanto la mental como la física; van de la mano.
"Te enfrentas junto a tu compañero, en la arena, donde te tienes que exponer tres minutos a muerte"
Iturralde, justo después de meter una anilla en el cuerno de la vaca, en la final de Zaragoza del año pasado
"Un recortador necesita físico, pero a la vez tiene que estar preparado mentalmente, porque se enfrenta a una vaca con unas características que se lo van a poner muy difícil"
¿Cuáles son las mejores cualidades que necesita un recortador?
Tiene que tener tantas cosas (se ríe). Físico, puedes empezar muy fuerte el acto, pero si no te da para terminar con la misma fuerza, vas mal. Y mental, porque esto es muy duro. Día tras día te enfrentas a un tipo de vacas con unas características que te lo van a poner muy difícil. No es como en las corridas de toros, donde los toros son cerriles (no han sido toreados, lidiados o corridos en ningún festejo taurino tradicional o en otros espectáculos taurinos). En el campeonato de anillas la vaca va repitiendo concurso tras concurso y según sale a la plaza sabe que le vendrá un recortador. Se te va a abalanzar e interponer en tu camino. Un recortador necesita físico, pero a la vez tiene que estar preparado mentalmente, porque se enfrenta a una vaca con unas características que le va a poner muy difícil. Pero a la vez tiene que tener mucho ojo, porque cada vaca es distinta. Algunas se meten más en las barreras, otras en las ruedas, a ese tipo de situaciones se les llama lidiar con las vacas. Pero también hace falta mucha compenetración con la pareja, te enfrentas a tres minutos que son pura agonía. Según sales, tienes que tomar decisiones, comunicarte con tu pareja, y obviamente no tenemos un pinganillo. Tienes que entenderte con tu compañero solo con la mirada, no se puede empezar a chillar de una punta de la plaza a la otra. También se necesita raza, hambre, ganas, algo muy difícil de entrenar: la clase. Es algo que lo lleva cada uno dentro, si no lo tienes, creo que no lo puedes tener. Físico, mental, ojo, compenetración, y lo innato.
UDATEST
Un lugar cercano para desconectar
La plaza de toros.
Un viaje inolvidable
Viaje de fin de curso.
¿A dónde iba de vacaciones cuando era crío?
Zuriza.
Canción del verano
Priti (Danny Ocean)
Comida y bebida favorita
Tejas y cigarrilos y radler.
A qué fiesta acude siempre
San Fermín.
¿Ha hecho nudismo?
No.
Su primer trabajo de verano
Construcciones Etxe-Haiz.
¿Cuál fue su primer amor de verano?
Ladrona N402 (es una vaca) jaja.
¿Dejaba algo para septiembre?
Más que algo.
¿No tiene miedo al toro?
Siento presión, esa presión de hacerlo bien que te lleva a unos límites insospechados. También miedo, porque tú no sabes al cien por cien si lo vas a hacer bien. Tienes que intentar hacerlo lo mejor posible, pero para ganar te tienes que exponer mucho. Es un momento de muchísima tensión, de repente te cuesta respirar, sientes agotamiento... Sientes miedo, y a la vez presión. También depende del momento de confianza en que estés, hay veces en las que estás muy fuerte, tanto que hasta puedes llegar a ver el pitón, sentir el cuero... Pero hay otras veces que no, no te encuentras contigo mismo. Cuando llega la vaca lo único que piensas es que ella viene y tú te tienes que ir, es algo inexplicable. La sensación de meter la anilla es algo adictivo.
Al meter las anillas a la vaca, todo el mérito es para el recortador..., o ¿tiene algo que ver la res?
Depende de cómo sea el recortador, pero también de cómo sea la vaca. Ciertos recortadores se enfrentarán mejor a ciertas vacas, por la manera que tienen de correr, por la forma de los pitones... Hay pitones a los que estás más acostumbrado y se te dan mejor. El mérito de meter la anilla es del recortador y de su compañero, pero suele cambiar mucho de una vaca a otra. Hay vacas que son más bravas, te salen más, otras se reservan más, algunas al principio salen muy fuertes, pero luego se dejan más... De fuera puede parecer algo sencillo, pero no lo es. Los que actúan lo hacen fácil. Si supiéramos todo lo que el recortador está pensando, afrontando, lo veríamos de otra manera. Tienes que pensar, pero a la vez no pensar. Siempre se dice que en el momento en que el recortador empieza a pensar, va mal. Es una buena paradoja, tienes que pensar, pero a la vez no hacerlo.
¿Cuál es su plaza de toros favorita?
La de Zaragoza, la plaza de La Misericordia. La energía que se vive ahí no se puede explicar. Es la favorita de mi compañero también, no es casualidad. Hay una cultura de las anillas muy fuerte, las anillas se celebran como goles de la Champions, la gente está volcada contigo, te impulsa, te da fuerza. También son importantes la de Calatayud o la Iruña, y la de mi pueblo, Azpeitia, es especial. Aunque solo he podido salir una vez hasta ahora, el 25 de este mes tendré la oportunidad de repetir.
"Cuando llega la vaca lo único que piensas es que ella viene y tú te tienes que ir, es algo inexplicable"
¿Y ganadería?
Un recortador prefiere la vaca que se adapte a sus cualidades. Actualmente hay tres ganaderías que están a un nivel muy alto, la de Jesús Marcén, la de Eulogio Mateo y la de Oliva Escudero.
Azpeitia es casi una isla en Gipuzkoa con su tradición taurina... ¿Hay relevo o se está perdiendo gran parte de esa afición?
Yo veo cada vez más afición a las anillas, y más gente que quiera llegar a ser recortador. Cuando empecé, solo estaba yo. Ahora tengo un grupo de jóvenes que me siguen todas las semanas a entrenar, como también van los concursos. Antes en Euskal Herria no había casi nada de afición, ahora hay mucha. Cada vez hay más recortadores y parejas que se quieren unir y consolidarse en el mundo de las anillas. En cuanto al festejo animal también, miro a mi pueblo y cada vez hay más gente. La gente querrá admitir o no. En Euskal Herria hay muchos puntos de vista, y todos son respetables, pero yo veo cada vez a más gente. Hace cinco años en mi pueblo había una asociación, ahora hay cuatro. Son grupos de amigos que cada vez quieren más. Desde hace diez años hasta ahora nos hemos ido organizando, nos estamos moviendo más gente, lo veo muy positivo. En una sociedad siempre habrá distintos puntos de vista, y todos son respetables, a mí me encanta escuchar opiniones hasta de la gente a la que no le gusta el mundo taurino, siempre que sea desde el respeto.
"En Euskal Herria hay muchos puntos de vista, y todos son respetables, pero yo cada vez veo a más gente aficionada"
¿ Qué le diría a los jóvenes que quieren ser recortadores?
Que pongan la mirada en el animal, que se enganchen a él. Que creen un ambiente en el que el foco sea el animal, y no el recortador. Uno tiene que disfrutar recortando, pero la base de todo es el toro o la vaca. Que construyan todo lo que estén haciendo desde el respeto, tanto al animal como al aficionado.
¿Qué opinan sus familiares y amigos sobre su pasión?
Suelen mencionar la palabra "locura", "tú estás loco". Tengo un entorno muy aficionado, me impulsan y me apoyan. La familia también me apoya, pero desde una perspectiva distinta. Cuando estoy recortando sufren mucho, pero aceptan que esa es mi pasión, es lo que me llena. La gente no entiende que al llegar el finde yo salga del trabajo y vaya a Valencia para estar con mi compañero y competir tranquilo y luego volver el domingo, es difícil de entenderlo. Ir a Zaragoza, correr tres minutos y volver. ¿Cómo se entiende eso? Hablaría sobre todo de apoyo, a todos los que me apoyan, se lo agradezco.
Ha ganado el campeonato de España dos veces consecutivas. ¿Piensa ir a por la tercera?
Este tipo de visualizaciones siempre las hago con mucho respeto en mi mente. Pero al mismo tiempo sabemos que, aunque no seamos los mejores del mundo, tenemos un gran potencial. Si conseguimos sacarlo, tendremos muchas oportunidades de conseguirlo. Hay que ir paso a paso. Lo que hemos logrado Javier y yo no es nada habitual ni nada esperado. Llegar a una batalla del nivel de la Plaza de Zaragoza, también conocida la "catedral del festivo popular" y ganar, es muy difícil. La plaza hasta arriba, los pesos pesados de la competición, aparecimos los jóvenes, que durante la temporada demostramos que podíamos hacerlo bien, pero ahí tuvimos que demostrar que los jovenzuelos podíamos llegar a ser los pesos pesados, y lo hicimos, no es nada fácil. Fuimos la revelación. Afrontamos la competición desde la humildad y la honestidad, pero sabemos que tenemos potencial y vamos a por ello, a dar el máximo.
¿Siente que tienen un gran futuro por delante?
En teoría sí, pero la experiencia nos dice que pensar en el futuro y a largo plazo puede ser un error. Yo estaba con Ander y parecía que íbamos a seguir mucho tiempo juntos, y de un día para otro la historia cambió. Es cierto que con Javier cada día confío más, y en ese sentido vamos de la mano. No me gusta demasiado hablar del futuro, aunque en teoría tengamos un buen porvenir, no me atrevo. Pero es cierto que somos dos chavales con ganas, raza, ambición de mejora.... Hemos tenido delante ciertas actuaciones de mucha complejidad que hemos sido capaces de resolver. Pero en este deporte dos más dos no son cuatro, hay que aferrarse a la realidad y seguir paso a paso, viviendo el día a día. Sabemos que el año pasado dimos un nivel alto, pero este año los dos venimos de lesiones. Aún así, tenemos la temporada planificada y sabemos a donde queremos llegar.
¿Y a dónde quieren llegar?
A la final del campeonato. Queremos estar en octubre (final de temporada) y dar nuestro mejor nivel.