La cancha principal del Elkargunea de Azkoitia acogerá el festival de fin de curso del club de gimnasia rítmica Zubiberri el próximo miércoles, 11 de junio, las 18.30. Cerca de un centenar de niñas y jóvenes mostrarán el trabajo que han hecho a lo largo del año bajo la atenta mirada de su preparadora, Visitacion Gutiérrez, Visi, una eibarresa que entró en contacto con el grupo de gimnasia rítmica de Azkoitia hace casi 30 años. Desde entonces, ha sido un pilar que ha ayudado a la promocion de este deporte en la localidad, como habrá ocasion de comprobar en la gran fiesta que se vivirá en Elkarguneala próxima semana.
¿Cómo se fraguó el vínculo de Visi con la gimnasia rítmica?
Mis inicios están ligados al club Ipurua de Eibar, donde fui gimnasta. Más adelante, nuestra preparadora nos animó a un grupo de chicas a sacarnos el título de entrenadoras. Yo lo obtuve en 1992 y, poco a poco, me fui metiendo en este mundillo. Desde entonces, no he dejado de entrenar.
¿Cuándo se produjo su llegada a Azkoitia y cómo nació Zubiberri?
Llegué a Azkoitia en 1998. Ya entonces existía un grupo de gimnasia rítmica en la localidad, pero la entrenadora que lo dirigía lo dejó. Me puse en contacto con el Ayuntamiento y así fue como surgió la oportunidad de tomar el relevo. Años más tarde, coincidiendo con la ampliación del polideportivo, decidimos dar un paso más y fundar Zubiberri en torno al año 2009,.
¿Cómo fueron los primeros pasos como entrenadora en Azkoitia?
Con el cambio de entrenadora bajó un poco el número de niñas, pero con el tiempo fuimos recuperando la confianza de las familias. El interés por la gimnasia rítmica creció y hoy en día tenemos alrededor de 100 niñas, una cifra muy buena para un pueblo como Azkoitia.
“La gimnasia rítmica está rompiendo tabús y cada vez son más los chicos que se acercan a este deporte””
¿A qué edad empiezan las niñas a practicar la gimnasia rítmica?
La mayoría empieza con cinco años y lo normal es que la sigan practicando hasta los 18, cuando se van a estudiar fuera. Sin embargo, en los últimos años eso está cambiando. Tenemos una chica de 25 años que volvió al club tras terminar la universidad. No es un caso aislado: ahora mismo contamos con otras cinco gimnastas mayores de 20 años.
¿Es habitual ver a gimnastas adultas compitiendo?
Cada vez más. No es algo exclusivo de nuestro club. Hoy es bastante común ver en las competiciones a chicas de 27 o 28 años, algo impensable hace unos años.
Disciplina y organización
¿Qué aporta este deporte a quienes lo practican?
Sobre todo disciplina y organización. Tienen que compaginar estudios, entrenamientos y otros compromisos, lo que les obliga a aprovechar bien el tiempo. Esa capacidar para organizarse su tiempo les sirve también en otros ámbitos de su vida y les ayuda a crecer como personas.
¿Cómo se estructura la temporada en el club?
Entrenamos lunes, miércoles y viernes. Al comienzo de la temporada trabajamos más la preparación física. Luego nos centramos en la técnica con los distintos aparatos (mazas, cinta, cuerda o pelota). Entre noviembre y diciembre montamos los ejercicios individuales y de conjunto, y, a partir de ahí, toca entrenar y repetir y repetir, hasta que los dominen por completo.
“La gimnasia rítmica y la anorexia fueron de la mano en el pasado, pero eso ahora ya es historia”
La mujer se está haciendo un hueco en deportes antes considerados para hombres. ¿Han llegado los chicos a la gimnasia rítmica?
Hemos tenido un par de niños en categoría prebenjamín, pero no en categorías superiores. Aun así, ese tabú se está rompiendo. Cada vez hay más chicos practicando gimnasia rítmica, tanto en Euskadi como en el resto de España. Compiten en la modalidad individual y también en conjuntos mixtos. Poco a poco, se está perdiendo el miedo al “qué dirán”.
¿Y qué nivel tienen esos chicos que compiten?
Muy bueno. En Euskadi hay muchos y algunos con un nivel muy alto. A nivel estatal también está creciendo mucho su presencia. La verdad es que en gimnasia rítmica se ha avanzado bastante en cuanto a igualdad de género.
Estigmas del pasado
¿Se ha quitado la gimnasia rítmica los estigmas que la señalaban por poner en riesgo la salud de las gimnastas con maratonianas sesiones de entrenamiento y una alimentación supeditaba más al rendimiento deportivo que a la salud?
La gimnasia de hace años y la actual no tienen nada que ver. En la alta competición las exigencias son enormes pero hoy se cuida mucho la salud de las gimnastas. Anorexia y gimnasia rítmica han ido de la mano, pero eso ya no ocurre. Las deportistas cuentan con un seguimiento médico constante y con nutricionistas que supervisan su salud.
Entiendo que esa exigencia es aún menor en el club que dirige
Hablamos de un deporte en el que la estética de la figura y del movimiento son importantes. El exceso de peso puede tener repercusión en forma lesiones en tobillos o rodillas, y no está de más cuidarse, pero al nivel de nuestro club la cosa no va más allá de decirles que no coman demasiadas chuches.