El sol ha ayudado a que niños y mayores hayan disfrutado de un día de San Sebastián francamente espectacular en Azpeitia.

Las lluvias de la noche y las bajas temperaturas de las últimas jornadas planeaban como una amenaza sobre la fiesta que tiene a los más pequeños como protagonistas pero, tal y como sucedió el año pasado, el 20 de enero mostró la mejor de sus caras, con un día espléndido, soleado y luminoso que ha acrecentado la espectacularidad que ya de por sí tiene esta jornada.

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Azpeitiko gaztetxoak, pozik danborra joaz! Arnaitz Rubio

Diana, procesion y misa

La diana de Izarraitz Txistulari Taldea y la escuela de música Juan Antxieta ha marcado el ritmo de las primeras horas de la mañana.

Las compañía Ardozaleak y Gure Ametsa han cogido el testigo con un recorrido por el casco urbano junto a la Banda de Música de Azpeitia que ha servido de preámbulo a la procesión y la misa mayor en la parroquia, y a la primera sokamuturra de estas fiestas una vez que ha llegado el mediodía.

La carroza sobre los oficios tradicionales de Azpeitia diseñada por Aitor Exposito cerró la marcha. Arnaitz Rubio

inicio de la marcha y carroza

Mientras los más avezados ponían a prueba sus piernas ante las reses, el medio millar de niños de la tamborrada infantil ocupaba el lugar en el que iban iniciar la marcha a las 12.30.

Familiares de los pequeños y muchos vecinos se situaban en los márgenes de las calles a la espera de que las piezas que dan forma a la celebración sonaran a través de la megafonía.

Mientras llegaba ese momento, los más curiosos se acercaban a ver la carroza que este año iba a cerrar la marcha. El tema elegido en esta ocasión han sido los oficios tradicionales de Azpeitia, y el autor del diseño premiado ha sido Aitor Expósito, quien nuevamente se ganó el favor del jurado con una vistosa carroza que ponía el foco en los oficios de lavandera, organero, carpintero, baserritarra y ferroviario, tan arraigados en esta localidad y representados por cinco niños.

La ilusión de los niños ha impregnado el desarrollo de la Tamborrada Infantil Arnaitz Rubio

Un mar de color

La colorida marea humana formada los niños y las niñas de Iraurgi Ikastetxea, Ikasberri Ikastola y Karmelo Etxegarai Ikastola, el grupo de danza Itsasi y la escuela de música Juan Antxieta completó un primer paso por la plaza antes de seguir su andadura por la parte vieja y regresar de nuevo a la plaza.

Una vez allí, cocineros, miqueletes, tercios, tropas de Zumalakarregi, soldados armados con sables, y napoleones rojos y azules fueron ocupando sus respectivas posiciones para seguir con sus tambores y barriles el ritmo de las piezas interpretadas que la Banda de Música de Azpeitia iba a interpretar desde el kiosco.

Al ritmo de la música

La primera en sonar fue la Marcha de San Sebastián, compuesta por Raimundo Sarriegi. A partir de aquí, el repertorio tomó un claro sabor local con la interpretación de piezas compuestas o arregladas por José Luis Frantsesena, como Soreasuko Sebastian, Agurra y Txokolo diana-txikia, antes de poner el punto final a su actuación con Goizeko Izarra, cuando la celebración se acercaba ya a las 14.00 horas. 

Tras esta pieza, las formaciones empezaron a abandonar la plaza en riguroso orden, camino de los lugares en los que se iban a despojar de los prendas que habían lucido en el recorrido y les habían convertido en los grandes protagonistas del día de San Sebastián.

Fin de fiesta

Las celebraciones continuaron con una sokamuturra y el festival Diskopuntx, antes del fin de fiesta y la arriada de la bandera, que, como cada año, tiene lugar cuando llega la medianoche del 20 de enero.